BOGOTA.- Colombia relajó el jueves su régimen de inversión extranjera, eliminando límites para la compra de acciones por parte de fondos foráneos, en un intento por detener el éxodo de capitales iniciado por la crisis económica y la elevada inseguridad que sufre el país.
El gobierno, a través del máximo organismo que fija las políticas económicas y sociales, CONPES, también determinó que los fondos obtendrán autorización automática para iniciar operaciones, ahorrando trámites que demoraban el ingreso de los recursos hasta tres meses.
Colombia fue uno de los países en América Latina que menos inversión extranjera recibió el año pasado, cuando cayó en 70 por ciento frente a 1998 a un mínimo en siete años, de 867 millones de dólares, debido al recrudecimiento del conflicto interno y a una recesión económica que contrajo el PIB en un histórico 4,48 por ciento.
Pero las modificaciones lucen poco efectivas, pues las acciones colombianas tienen un ínfimo peso en los portafolios de fondos extranjeros, que recortaron en más de 25 por ciento hasta abril pasado el saldo de sus inversiones en el país a un mínimo en cinco años, de 545 millones de dólares, frente al mismo mes de 1999.
"Creemos que es necesario vincularlos más activamente al desarrollo del país y no encontramos convenientes las restricciones que tenían", sostuvo el director del estatal Departamento Nacional de Planeación, Mauricio Cárdenas, al anunciar los cambios.
La salida de los fondos provocó parte de la caída de hasta 9,8 por ciento en los índices de las bolsas locales registrados de enero a mayo de este año, cuando en el mismo lapso de 1999 las caídas no superaron 2,3 por ciento.
La llegada de capitales se considera decisiva para la quinta mayor economía de América Latina, dadas las dificultades para acceder a los mercados internacionales de crédito, luego de las degradaciones de que fue objeto por parte de las agencias calificadoras por el pobre desempeño económico, afectado por el conflicto interno.
Hasta antes de las decisiones del CONPES, los fondos tenían un límite para la compra de acciones de 40 por ciento del total de acciones con derecho a voto de una sociedad.
Pero pocas veces los fondos han aspirado a hacerse a un control mayor, dado que un grueso de las acciones emitidas por las sociedades no circula en el mercado, por el temor de empresarios de perder el control de sus firmas a manos de inversionistas "indeseados".
"Creemos que no están solucionando muchas cosas con esos cambios, porque no han cambiado las razones que llevaron a los fondos a salir del país, como la crisis económica, las amenazas de la guerrilla o el hecho de que la mayoría de las acciones están en muy pocas manos", sostuvo un corredor en Bogotá quien pidió el anonimato.
Al amparo del anterior régimen, recientemente fondos extranjeros doblaron la propiedad que tenían en la mayor financiera del país, Bancolombia , a casi 40 por ciento, inyectando 90 millones de dólares de una capitalización total por 175 millones.
Los fondos extranjeros, cuyo ingreso fue permitido en 1992 cuando el país levantó parcialmente un control de cambios de casi tres décadas, llegaron a tener saldos máximos en portafolio de acciones por 1.200 millones de dólares al comenzar 1998.
