SANTIAGO.- El empresario Sebastián Piñera realizó hoy una dura crítica a la reforma laboral impulsada por el Gobierno, al señalar que esta debe dejar las rigideces de "épocas anteriores", llamando a flexibilizar la jornada de trabajo.
"Se debe hacer una reforma laboral moderna, con mayor flexibilidad, que
permita la generación de empleos y mejore las relaciones entre trabajadores y
empresarios. No sigamos con la nostalgia enfermiza, que corresponde a otra
época", sostuvo Piñera al intervenir en el II Congreso Chileno de Recursos
Humanos, organizado por Icare.
Dentro de los perfeccionamientos con que debe contar la legislación laboral chilena a futuro, Piñera mencionó la flexibilización de la jornada de trabajo. "Deberíamos dejar que una persona trabaje, por ejemplo, 4 días
intensos y tres de descanso. ¿Por qué no se podría tener una jornada de
trabajo menor en tiempos de baja demanda y mayor en períodos de peak de la
actividad, siempre que se acuerde libremente entre las partes?", se
preguntó.
Indicó que otros aspectos sujetos a flexibilización deberían ser los contratos 'part-time', los salarios de la administración pública, el trabajo en el hogar, el fuero maternal, el sistema de indemnizaciones, la opción de que los trabajadores tengan 'stock options' en su empresa, y que ésta pueda enfrentar una crisis sin necesidad de desvincular a sus empleados.
La nueva economía va a generar empleos diferentes, pero se requieren mecanismos en la legislación que permitan esa creación de nuevos puestos de trabajo, porque por el momento la rigidez que existe no lo permite.
Por otra parte, Piñera se refirió a las 8 medidas que anunció el Gobierno
para reimpulsar la economía y consolidar la reactivación.
"Apuntan a acelerar el proceso de reactivación, pero los problemas de fondo no están siendo afectados. Esta economía necesita abordar el problema de la confianza y expectativas de crecimiento. El Gobierno debería disipar la nube que impide mirar el futuro con optimismo", sostuvo.
Según su visión, la economía chilena se mueve con 4 motores, "de los cuales sólo las exportaciones están creciendo a un nivel aceptable, pero el gasto público está muerto porque se busca equilibrio fiscal. Por otra parte, el consumo y la inversión no están trabajando en plenitud, todo esto por un
problema de confianza en el futuro de la economía".
