TOKIO.- La caída de los valores de las aerolíneas provocada por la noticia de la posible bancarrota de United Airlines y el accidente de una avioneta en Miami (EEUU), provocaron el tercer día de caída del Nikkei.
El indicador selectivo Nikkei de los 225 principales valores cayó 54,31 puntos o un 0,61 por ciento y cerró en 8.863,26 puntos.
El Topix, índice que reúne todos los valores de la primera sesión, cedió 6,21 puntos o 0,72 por ciento, hasta 860,65 puntos.
El descenso en Estados Unidos del indicador Dow Jones y la ausencia de incentivos de compra, provocaron la apatía de los inversores, según los analistas.
La noticia de que una avioneta se estrelló contra un edificio de la Reserva Federal en Miami, despertó sospechas de un atentado terrorista en anticipo de un posible ataque estadounidense contra Irak.
Posteriores descensos en la bolsa fueron evitados por las alzas en el sector de las altas tecnologías, por el anuncio de que la norteamericana Intel, el primer fabricante mundial de chips, aumentó sus previsiones de resultados para el cuarto trimestre.
Con excepción de los transportes marítimos y las siderúrgicas, los descensos afectaron a todos los sectores y bajaron en especial las aerolíneas que cayeron más de un 3 por ciento al conocerse la posible quiebra de United Airlines, la número dos en EEUU.
La aerolínea japonesa All Nippon Airways bajó un 3,41 por ciento y Japan Airlines System cedió un 3,06 por ciento.
La comercializadora Tomen fue la líder en volumen de negociaciones y avanzó un 8,8 por ciento tras informaciones de que Toyota Motor considera hacerla parte de su grupo.
Las acciones de Canon fueron las más negociadas en términos de valor y cerraron con un alza del 0,2 por ciento.
Los bancos obtuvieron resultados mixtos: el grupo Mitsubishi Tokyo Financial avanzó un 0,43 por ciento, mientras que el Mizuho Holdings retrocedió 1,72 por ciento.
Entre las firmas del motor subieron Nissan (+1,80%) y Honda (+0,44%), mientras que las caídas afectaron a Toyota (-1,24%), Mazda (0,41%) y Mitsubishi (-1,90%).
La atención de los inversores seguirá centrada en los mercados estadounidenses y en las reformas fiscales propuestas por el Gobierno japonés, además del presupuesto adicional que se prevé para la próxima semana, anotan los analistas.
