SANTIAGO.- La filial chilena del grupo italiano Parmalat abonó hoy el 20% de la deuda de 3,8 millones de dólares que mantiene con productores de leche en Chile, después de que su matriz se declaró el año pasado en bancarrota.
"No sentimos satisfechos por el abono que ha hecho Parmalat", señaló Carlos Arancibia, gerente general de la Federación de Productores de Leche, entidad que agrupa a los proveedores de Parmalat Chile.
El dirigente señaló que tras la cancelación de una parte de la deuda, los productores han decidido no suspender el suministro de leche a la empresa.
"Eso no significa que no estemos en estado alerta por el resto del dinero que se nos debe, simplemente significa que por ahora la amenaza de vender nuestro producto a la competencia no se va a concretar", destacó Arancibia.
Los productores de leche habían advertido que si Parmalat no les abonaba un porcentaje del dinero que les adeuda venderían su leche a otras empresas del sector.
Parmalat Chile ha aplazado dos veces los pagos de deudas a sus 200 proveedores, después de que su matriz italiana se declaró en quiebra por el descubrimiento de un multimillonario fraude contable a fines de 2003.
"Esperamos que Parmalat cumpla. Si no adoptaremos medidas de presión", afirmó el gerente de la Federación de Productores de Leche, quien dijo que los proveedores de la empresa láctea se mantienen atentos respecto al escándalo financiero que envuelve a la casa matriz de la compañía.
En diciembre, le fueron entregados a Parmalat Chile unos 10 millones de litros de leche y se le proveería de una cantidad similar en este enero, que tendría un coste de 3,8 millones de dólares.
Parmalat ha pedido "comprensión" a sus proveedores por las complicaciones financieras que afronta y ha asegurado que está esforzándose por cumplir sus compromisos financieros, para seguir operando en Chile.
La compañía láctea chilena Calán ha ofrecido 30 millones de dólares al grupo italiano por su filial en este país, según ha informado la prensa local.
Los productores de leche protestaron la semana pasada por el incumplimiento de la empresa en los pagos frente a las instalaciones de la Parmalat en el sur de Chile.
La Federación de Productores de Leche a la fecha ha sostenido conversaciones con las demás empresas lácteas, como la suiza Nestlé y la chilena Soprole, subsidiaria de la neozelandesa Fonterra, para venderles su producción en caso de que Parmalat no salde lo que adeuda.
Parmalat, que llegó al mercado chileno a comienzos de la década pasada, compra el siete por ciento de la leche que se produce en este país suramericano.
