BUENOS AIRES.- Ante el estancamiento de la negociación con las proveedoras de energía y gas para subir las tarifas congeladas desde 2002, el gobierno argentino decidió llamar a debates públicos, que las firmas ven como una maniobra de presión para forzarlas a aceptar su propuesta.
Las audiencias públicas en Argentina suelen transformarse en una especie de "talk show" en el que las asociaciones de defensa del consumidor y las empresas discuten -muchas veces ante las cámaras de televisión- las razones para aumentar o mantener el precio de las tarifas.
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