WASHINGTON.- El presidente George W. Bush ha dado nuevo impulso a su campaña para poner fin a la dependencia de EE.UU. del petróleo importado, en un momento de fuertes alzas del precio del crudo tanto en el mercado local como en el internacional.
En un discurso pronunciado en el estado de Ohio, Bush señaló el miércoles que esa dependencia del petróleo importado se ha convertido en una amenaza para la seguridad nacional e instó al Congreso a permitir la exploración en un santuario ecológico de Alaska “por el bien del país.”
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