WASHINGTON.- Aun cuando las tendencias del combate a la pobreza entre 2002-2004 son alentadoras —principalmente en lo que respecta a la pobreza rural— México enfrenta desafíos como la disminución de la pobreza urbana, que se mantiene estancada, así como hacer su sistema de protección social menos regresivo y más equitativo para darle mayor cobertura a los pobres.
Así lo indica el estudio Generación de Ingresos y Protección Social para los Pobres, realizado por el Banco Mundial a solicitud del gobierno mexicano y presentado esta mañana en Los Pinos. El documento, la segunda de tres partes de un estudio programático sobre la pobreza en el país, indica que en 2002 los niveles de pobreza nacional y rural recientemente regresaron a los observados antes de la crisis de 1994-1995.
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