SANTIAGO.- El Gobierno argentino decidió cortar temporalmente todo el suministro de gas natural tanto en el norte, como en la zona centro-sur, según informó la Comisión Nacional de Energía (CNE).
Lo anterior se debe a la paralización de las actividades de los sindicatos de trabajadores del Petróleo y Gas Privado de Neuquén, Río Negro, Chubut y Santa Cruz, quienes de manera coordinada se tomaron gran parte de los pozos de la zona como forma de protesta en contra de la "irregular aplicación del impuesto a las ganancias del sector laboral de esa actividad, cuyas características son muy diferentes de la de estos sindicatos".
El secretario ejecutivo de la CNE, Pablo Serra, fue informado de esta situación a las cuatro de la madrugada cuando su par trasandino Daniel Cameron lo llamó desde Argentina. Posteriormente Serra alertó a la ministra de Energía, Karen Poniachick, quien inmediatamente se comunicó con el ministro del Interior, Belisario Velasco.
Ante el complejo panorama, el Ejecutivo decidió activar el plan de contingencia que tenía preparado hace varios meses para enfrentar este tipo de inconvenientes: los industriales deberán utilizar combustibles alternativos como el diesel o fuel-oil, mientras que los sectores residenciales y comerciales de Santiago, Valparaíso y Concepción serán abastecidos con el gas remanente en los ductos por los próximos cuatro días.
La CNE informó que la autoridad argentina estaría decretando la llamada "Conciliación Obligatoria", proceso que obliga a las partes a deponer sus medidas de presión y retomar las labores, mientras se desarrolla un proceso negociación. De prosperar esta iniciativa, la situación debería volver a la normalidad entre hoy y mañana.
Sin embargo, si esto se prolonga por más días, los hogares y el comercio serán abastecidos con propano-aire.