TORONTO.- Los países emergentes con superávit deberán asumir reformas para flexibilizar sus monedas, fortalecer el gasto social e incrementar el gasto en infraestructura, de acuerdo al informe final de la cumbre del G20.
"Nos comprometemos a tomar acciones coordinadas para sostener el crecimiento, crear empleos y obtener un crecimiento más fuerte, sostenible y equilibrado", señala el proyecto de declaración.
Pero esas acciones "serán diferentes y ajustadas a las circunstancias nacionales", reconocen los líderes de los países industriales y emergentes.
En el caso de los emergentes con superávit en sus cuentas corrientes, esas reformas "ajustadas" deberán servir para "aumentar la flexibilidad de la tasa de cambio", para "fortalecer las redes de protección social" e "incrementar el gasto en infraestructura".
Esta declaración se produce una semana después de que China anunciara su intención de flexibilizar su régimen cambiario, despegando al yuan de la cotización invariable que mantenía frente al dólar desde hacía casi dos años.