BRUSELAS.- Los países de la Unión Europea están de acuerdo en introducir un mecanismo de vigilancia de las divergencias entre sus economías en materia de competitividad, que incluya la posibilidad de formular recomendaciones de medidas correctivas.
El grupo especial que analiza la reforma de las reglas de la unión económica y monetaria europea celebró hoy su tercera reunión desde que fue creado en marzo pasado, y alcanzó un "amplio consenso" sobre la conveniencia de establecer dicho mecanismo, según informó un comunicado de su presidente, Herman Van Rompuy.
El mecanismo de vigilancia de la competitividad se basará en "tres elementos", precisa la nota, y "deberá tener en cuenta la especificidad de la zona euro", de la que forman parte sólo dieciséis de los veintisiete estados miembros.
El primer elemento del mecanismo consiste en la creación de un sistema de alerta fundado en indicadores clave (marcador).
En segundo lugar, los miembros del grupo están de acuerdo en que, si dichos indicadores superan ciertos niveles, se lleve a cabo una evaluación en profundidad de la situación.
Por último, si fueran necesarias medidas correctivas, se formularán recomendaciones al estado o estados afectados en el marco de un procedimiento por "desequilibrio excesivo".
Este nuevo procedimiento por "desequilibrio excesivo" recuerda en cierta medida al de "déficit excesivo" recogido en el Pacto de estabilidad y crecimiento, cuyo endurecimiento también está analizando el grupo de Van Rompuy a fin de evitar la repetición de crisis presupuestarias como la de Grecia.
Por lo que respecta al reforzamiento del Pacto, los miembros del grupo (esencialmente los ministros de Finanzas de los Veintisiete) están de acuerdo en prestar más atención a la evolución de la deuda pública, de tal forma que los países más endeudados deberán fijarse objetivos de consolidación presupuestaria más ambiciosos.
Los representantes de los gobiernos están de acuerdo, igualmente, en ampliar el repertorio de sanciones financieras y no financieras, incluido el uso del presupuesto comunitario.
Las sanciones "deberán ser progresivas", puntualiza el comunicado, que añade que "han sido discutidas diferentes opciones para reforzar su automatismo".