Alex Moreno, El Mercurio
SANTIAGO.- El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, anunció un nuevo beneficio para que los contribuyentes, especialmente las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) puedan reprogramar sus deudas tributarias morosas con la Tesorería General de la República.
Para estos efectos, el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera ingresó un proyecto de ley al Congreso Nacional, que otorgará facultades a la Tesorería para ampliar el pago de impuestos morosos.
El Secretario de Estado informó que esta medida beneficiará especialmente a las Pequeñas y Medianas Empresas con deudas tributarias contraídas hasta el pasado 30 de junio de 2010. El plazo para reprogramarlas se extenderá hasta el 30 de junio de 2011.
"Esta es otra medida potente que pondrá en marcha el Gobierno del Presidente Piñera, para ir en apoyo de los contribuyentes, especialmente las miles de Pymes del país, en especial de las zonas que fueron más golpeadas por el terremoto", dijo el Ministro Larraín al hacer el anuncio.
"Este beneficio, junto con la rebaja del Impuesto de Timbres y Estampillas y la exención tributaria para las utilidades que sean reinvertidas (14 Quater), constituyen un poderoso estímulo para que las Pymes sigan trabajando, y creando más y mejores empleos", agregó.
En virtud del artículo 192 del Código Tributario, la Tesorería General de la República puede otorgar facilidades de pago por hasta 1 año, en cuotas periódicas, para el pago de impuestos adeudados, a contribuyentes que cumplan ciertos requisitos.
Con la finalidad de apoyar a los contribuyentes que han experimentado dificultades económicas, en 2007 el Congreso aprobó una medida consistente en la ampliación del plazo, de 1 año hasta un máximo de 36 meses. Esta medida fue renovada en sucesivas oportunidades, siendo la última de ellas en abril de 2009 (Ley N° 20.343).
El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, dijo que resulta conveniente prolongar la vigencia de la facultad de la Tesorería para otorgar facilidades de pago, considerando el hecho de que los contribuyentes han seguido generando deuda tributaria morosa a contar del 31 de marzo de 2009, lo que se ha visto agravado por los efectos de la crisis financiera y las consecuencias derivadas del terremoto del pasado 27 de febrero.
