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Santiago: Miércoles 17 de diciembre del 2025 | Actualizado 02:03
LONDRES.- La actividad del sector privado de la zona euro se aceleró este mes, según un sondeo publicado el jueves que desafía las expectativas de un menor crecimiento económico y acalla los temores a una nueva recesión.
Tanto los servicios como la manufactura mostraron mayor dinamismo y las firmas contrataron a más trabajadores, aunque la firma "Markit", compiladora del sondeo, advirtió que todo podría tratarse de un impulso temporario por el Mundial de Sudáfrica.
"Nos sorprendimos mucho, es un buen comienzo del segundo semestre del año, pero aún sospechamos que una desaceleración del crecimiento del PIB está dentro de las posibilidades", dijo Chris Williamson de Markit.
El índice de gerentes de compras de Markit para el sector servicios, compuesto por sondeos entre 2.000 empresas que van desde hoteles a bancos, subió a 56,0 en julio desde 55,5 en junio, superando las expectativas de una lectura de 55,0 y excediendo incluso las proyecciones más optimistas de un sondeo de Reuters.
El sector manufacturero de la zona euro, que lideró la salida de la recesión de gran parte de la economía del área, también aceleró su paso.
El indicador sobre la actividad fabril avanzó a 56,5 este mes desde un 55,6 en junio, cuando se esperaba una caída a 55,2, mientras que el índice sobre la producción mejoró a 58,3 en julio desde un 57,2 el mes previo.
El índice compuesto, integrado por los servicios y la manufactura, subió a 56,7 desde 56,0, también desafiando las previsiones de una baja a 55,5.
"Esto sugiere que en el conjunto de la zona euro se evitará una recaída en la recesión", sostuvo Williamson.
En Alemania, la mayor economía de Europa, el sector servicios creció a su ritmo más rápido en casi tres años, al tiempo que la actividad manufacturera se expandió a un ritmo no lejano a un máximo de 14 años alcanzado en abril.
La vecina Francia registró un repunte en los servicios, pero el sector manufacturero se desaceleró.
El índice sobre el empleo en toda la zona euro subió a 51,7 en julio desde un 50,8 en junio, alcanzando un máximo desde abril del 2008.
La expansión general habría sido motorizada por un alza en los nuevos pedidos, al mejorar las condiciones de los mercados y las exportaciones de la mano de la debilidad del euro en los últimos meses.
