Escasas lluvias y aumento de demanda provoca alza en costos de generación eléctrica

SANTIAGO.- Fuera de los problemas técnicos que últimamente ha mostrando el sistema eléctrico, que llevó a que la autoridad fortaleciera la labor del CDEC-Sic, hay otras preocupaciones relacionadas al sector. El 2010 es -a la fecha- un año poco lluvioso,  la economía está creciendo con mucha fuerza y la ola de frío aumentó con fuerza el consumo de electricidad en los hogares, lo que se traduce en que la demanda eléctrica esté creciendo cerca de un 8%, el nivel más alto de los últimos cinco años.

A esto se suma, que los embalses de todo Chile tienen un 43% menos de agua que en un año promedio, mientras que si se compara con la misma fecha de 2009, representa una disminución del 19%, según informó la Dirección General de Aguas (DGA).

En el reporte se detalla que los embalses que se utilizan exclusivamente para generación, experimentaron una baja del 11,3% respecto a junio, la que se eleva a 20% comparada a igual fecha del 2009, y al 30,6% en comparación a su promedio.

La DGA informa además que en las regiones de Atacama y Coquimbo se mantiene el superávit de lluvias, sin embargo, entre las regiones de Valparaíso y del Maule se presenta un déficit entre un 22% y un 35%, el que ha aumentado con respecto al mes anterior, precisamente porque julio fue deficitario en precipitaciones.

Todos estos factores hacen que una parte importante del sistema de generación eléctrica opere en base a carbón, petróleo diésel y gas natural, que son combustibles más caros. Por el lado de la demanda, además, ya no están operativas en el país las campañas de ahorro energético de otros años.

En la Comisión Nacional de Energía (CNE) confirman el aumento de la demanda, pero agregan que el sistema tiene la capacidad de atenderla, incluso en esta condición de falta de lluvias, aunque tiene un impacto en costos.

"Desde el punto de vista de la seguridad de abastecimiento, el SIC posee capacidad instalada suficiente para abastecer la demanda, incluso bajo una condición seca como la que se está observando. No obstante, el bajo nivel de los embalses, el alto crecimiento de la demanda redunda en mayores costos de producción y costos marginales de la electricidad", reconoció a Emol Juan Manuel Contreras, secretario ejecutivo de la CNE.

"Los costos de generación se han mantenido altos producto de las escasas precipitaciones, lo que sumado a la salida de servicio por mantenimiento de algunas centrales carboneras, provoca mayor utilización de petróleo diesel en generación", añade Contreras.

María Isabel González, consultora del área y ex secretaria ejecutiva de la CNE, opina que es efectivo que la demanda ha estado creciendo fuerte, pero agrega que el país tiene capacidad instalada (1.000 MW) dada por las centrales a carbón que se hicieron operar cuando en el país faltaba el gas natural argentino. Desde ese punto de vista, indica que hoy la posibilidad de déficit no es un escenario probable.

No obstante, admite que el hecho de operar con generación termoeléctrica (gas, carbón, petróleo diesel) va a tener un impacto en los costos marginales (el costo de la energía en el mercado diario) del sistema.
 
Sobre la posibilidad de reponer los planes de ahorro energético, la consultora dice que ello es un desafío permanente del país y que de hecho, muchas grandes empresas avanzan en materia de eficiencia en lo que se refiere a consumo eléctrico.