EMOLTV

ONU: Indigentes pueden llegar a 1.000 millones por la crisis y alza de los alimentos

Según el organismo, para erradicar la pobreza resulta más eficiente abordar las causas que la provocan, que paliar momentáneamente sus efectos.

03 de Septiembre de 2010 | 08:55 | EFE
imagen

Las Naciones Unidas están advirtiendo sobre el incremento de la pobreza por la crisis económica.

El Mercurio

GINEBRA.- Un estudio del Instituto de Investigaciones de las Naciones Unidas para el Desarrollo Social (UNRISD), divulgado hoy, señala que para erradicar la pobreza resulta más eficiente abordar las causas que la provocan, en vez de centrarse en paliar momentáneamente sus efectos.


"Las actuales políticas para eliminar la pobreza se centran en dar a los pobres las cosas que les faltan, en lugar de plantearse por qué les faltan”, criticó el coordinador de este informe, Yusuf Bangura.


El estudio reprocha que las actuales medidas para terminar con la pobreza son erróneas, al separar las políticas de pobreza de las del crecimiento económico.


Para ofrecer un ejemplo más gráfico, el informe cita a Brasil y a los progresos registrados bajo el mandato de Lula da Silva en cuanto a reducción de pobreza y desigualdad, lo que al mismo tiempo “ayudó consolidar la democracia,” considera.


"Pero el desafío actual pasa por abordar las causas estructurales de la desigualdad y la pobreza,” resalta, ya que “a pesar de los avances, las desigualdades persisten altas, lo que cuestiona el alcance en el progreso de la democracia del bienestar.”


"Los hechos prueban que la pobreza se reduce cuando las políticas económicas y sociales se apoyan mutuamente,” señala el informe, a lo que Bangura añadió que “cuando una gran parte de un país es pobre, no tiene sentido despegar la pobreza de las dinámicas de crecimiento económico.”


De este modo, el informe recuerda que “los países que han aliviado la pobreza disponían de sistemas políticos orientados al crecimiento y a la elevación del estado del bienestar, además de que crearon y mantuvieron burocracias competentes.”


"El crecimiento económico por sí mismo no conduce necesariamente a mejoras sustanciales en empleo, ingresos y bienestar,” alerta e insiste el Instituto de Investigaciones de las Naciones Unidas para el Desarrollo Social.


De continuar con las actuales medidas para paliar la pobreza, el estudio estima que el número de indigentes en 2015 se elevará a unos 1.000 millones, ya que la crisis mundial de la economía y de los alimentos cuestiona el logro de los objetivos del Milenio.


La pretensión de reducir a la mitad la pobreza y el hambre en 2015 registró un notable impulso antes de la crisis, pues las personas que vivían con 1,25 dólares al día cayeron de 1.800 millones en 1990 a 1.400 millones en 2005.


Sin embargo, estos progresos fueron dispares según la región, dado que las mejores cifras se situaron en el este de Asia, gracias al rápido crecimiento de China, mientras que en el África subsahariano los avances resultaron menores.


"Pobreza y desigualdad deben considerarse como partes inconexas de un mismo problema,” subraya el informe, que concluye que “las política sociales, en su mejor versión, no pueden separarse de los esfuerzos para crear un crecimiento centrado en el empleo”.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?