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Santiago: Viernes 19 de abril del 2024 | Actualizado 20:02
SANTIAGO.- La empresa MPX, ligada al empresario brasileño Eike Batista, manifestó su satisfacción tras la decisión de la Corema de Atacama de suspender el proceso de calificación ambiental de la central termoeléctrica Castilla (2.100 MW) que la firma pretender construir 80 kilómetros al suroeste de Copiapó.
"La empresa señala su satisfacción por la decisión del Seremi de Salud y de la Corema de Atacama, que permite que el proyecto Castilla pueda ser calificado con pronunciamientos sectoriales válidos y no con una calificación industrial que anteriormente la propia Seremi de Salud de Atacama y su Unidad de Medio Ambiente han señalado que es errada y no se ajusta a la ley, lo que ha sido también respaldado por informes independientes solicitados a expertos del Dictuc y de la Universidad de Chile", señaló MPX en un comunicado.
Subrayó que la Corema, por decisión de sus miembros, ha determinado suspender el procedimiento de evaluación del proyecto Central Castilla por cuanto no se cuenta con una calificación industrial que produzca efectos y que permita evaluar el proyecto.
Por ello, la compañía recalcó que confía en la institucionalidad medioambiental del país y en el camino señalado por la Corte Suprema en su fallo del 15 de noviembre del presente año "al señalar que el Seremi de Salud tiene la facultad de invalidar un pronunciamiento ilegal, con la debida participación de los interesados".
La invalidación no sólo es una atribución de revisión permanente, por razones de legalidad, sino también un deber de las autoridades administrativas del Estado de velar por la legalidad en sus actos y puede ejercerse durante un plazo que se extiende hasta por dos años y al no ser un recurso, como lo señaló la Corte Suprema, no caduca por haber sido ya solicitado", puntualizó.
Con todo, sostuvo que Castilla "cumple y supera todas las exigencias de la normativa medioambiental de Chile".
El proyecto se ubicaría a 80 kilómetros al suroeste de Copiapó, dentro de la Hacienda Castilla que tiene 240.000 hectáreas, contempla una inversión estimada de US$ 4.400 millones para la central termoeléctrica y US$ 100 millones para la planta deasaladora.
