El terremoto implicó una serie de desafíos a la industria aseguradora y se busca perfeccionar el sistema en transparencia y cobertura.
El MercurioSANTIAGO.- El último terremoto arrojó una serie de experiencias para uno de los principales damnificados por el sismo: la industria aseguradora, que ha debido pagar miles de siniestros asociados a los efectos del sismo.
Desde el punto de vista del regulador también surgieron una serie de lecciones que la Superintendencia de Seguros y Valores (SVS) espera plasmar en diversos cambios sobre la materia, básicamente enfocados a la información y la cobertura de quienes contratan seguros contra este tipo de siniestros, fundamentalmente asociados a créditos hipotecarios, según consigna hoy El Mercurio.
La industria aseguradora ha debido responder a unas 220 mil denuncias recibidas por daños en viviendas, edificios, fábricas, perjuicios por paralización y vehículos, y que implicarán un desembolso cercano a los US$ 8 mil millones, destaca la publicación.
Entre los cambios que está estudiando la SVS está exigir a las compañías de seguros que informen en la primera página del contrato un resumen con el precio de la póliza, la cobertura, el deducible y las exclusiones establecidas.
El objetivo es que las personas puedan distinguir fácilmente sus beneficios al momento de utilizar la cobertura.
La Superintendencia también establecerá una cobertura mínima para las pólizas de terremoto, para evitar que personas o empresas se queden sin indemnizaciones por daños pese a tener un seguro.
Un 33% de los siniestros en vivienda no correspondieron a pago por estar bajo el deducible, el asegurado desistió de la denuncia o el daño no estaba en la cobertura contratada.
Segun consigna El Mercurio, al 31 de octubre, las compañías de seguros habían liquidado el 94% de las denuncias por daños en viviendas, de las cuales el 66% requirieron de un pago. En el caso de las empresas y vehículos, el 68,9% de los casos han sido liquidados.
Para lograr este nivel de cumplimiento, las compañías se vieron obligadas a aumentar su personal -incluso traído desde el extranjero-, y la SVS tuvo que implementar medidas para facilitar el proceso como la "liquidación express" o rehabilitar la inscripción como liquidador de siniestros a quienes fueron eliminados del registro entre 2000 y 2009.
El plan de la autoridad fiscalizadora es que estas medidas queden reguladas, por lo que se diseñará una normativa que establezca un procedimiento especial de liquidación en caso de siniestros, se detalla.
También se anunciarán medidas que buscan simplificar el análisis de los daños en edificios, tanto en departamentos como en espacios comunes.
Asimismo, habrá un seguimiento más detallado de las empresas internacionales reaseguradoras, que son las que han colocado los recursos para que sus coligadas nacionales respondan a los chilenos afectados.