SANTIAGO.- El Consejo del Banco Central ajustó este lunes su proyección de crecimiento para la economía chilena en 2010 desde un rango entre 5,0-5,5% a
5,2%, y mantuvo para 2011 un 5,5-6,5%.
Al dar a conocer el Informe de Política Monetaria (IPoM) a la Comisión de Hacienda del Senado, el Consejo señaló que la economía chilena ha continuado con una trayectoria de crecimiento a un ritmo similar al contemplado en el IPoM anterior, cerrando holguras de capacidad.
En él se da cuenta que en el futuro debiera observarse un cambio en la composición de la inversión, con un mayor protagonismo de la construcción, debido a las expectativas sobre el proceso de reconstrucción.
"La mayor actividad esperada para la inversión asociada al proceso de reconstrucción se contrapone, en parte, al menor impulso proveniente del aplazamiento de proyectos relacionados con los sectores minería y energía. Así, el catastro de la Corporación de Bienes de Capital corrige a la baja la inversión esperada para el período 2010-2012, pero la aumenta para el bienio 2013-2014.
El escenario base del informe estima que este año la tasa de inversión respecto del PIB, medida a precios constantes y corrientes, será de 28,4% y 21,7%, respectivamente. En 2011, en tanto, la tasa aumentará, situándose sobre 30% en términos reales.
Asimismo, el IPoM destaca que, en el escenario base, la actividad y la demanda interna El IPoM puntualiza que para 2011 el crecimiento seguirá empujado por la demanda interna, que aumentará 6,6% anual. El consumo y la inversión tendrán una evolución dinámica, aunque más moderada que en el 2010. Esto se apoya "en indicadores de confianza que siguen optimistas, un positivo mercado laboral, condiciones monetarias que aún son expansivas y condiciones favorables para el acceso al crédito".
Dólar
El Consejo supone que el tipo de cambio real tendrá una moderada depreciación hacia el largo plazo. Ello, tomando en cuenta que, al cierre estadístico de este IPoM, el TCR "está en torno a los mínimos coherentes con sus fundamentales de largo plazo".
"Más allá de la evolución del dólar en los mercados internacionales, los movimientos del peso también han respondido, entre otros factores, a la evolución de los términos de intercambio (en que destaca el incremento de precio del cobre), el diferencial de tasas de interés de corto plazo las decisiones de inversión de los inversionistas institucionales", indica el IPoM, subrayando que los efectos de la apreciación de la paridad real han sido heterogéneos entre los distintos sectores de la economía, pero que el agrícola ha sido el que ha registrado una mayor apreciación por la mayor preponderancia de los mercados de Estados Unidos y Europa.
Inflación
El informe estima que este año el IPC cerrará en +2,8% y que se mantendrá en torno a la meta hasta fines del horizonte de proyección (cuarto trimestre 2012). Mientras, los indicadores subyacentes tendrán tasas de variación anual menores que las del IPC y alcanzarán a 3% recién hacia fines del próximo año, para mantenerse allí durante el resto del horizonte de proyección.
Ello, dada la absorción de las holguras de capacidad, los mayores precios de los alimentos (por el traspaso acotado de los precios internacionales) y el supuesto de que el proceso de compresión de márgenes en productos específicos no continuará hacia delante.
Además, el IPoM supone que, si bien el escenario externo seguirá agregando impulso a la economía, éste se irá diluyendo en el tiempo. Así, las presiones inflacionarias importadas se mantendrán contenidas, a lo que hay que agregar que los salarios nominales tendrán reajustes acorde con el estado cíclico de la economía y la dinámica de inflación, y que las decisiones de ajustes de precios se basan en expectativas de inflación alineadas con la meta.
Escenario internacional
En cuanto al escenario internacional, la principal preocupación es que la recuperación global sea más lenta que la prevista, constituyendo un menor impulso externo para la economía.
También se analizó el alto nivel de desempleo que persiste en las economías desarrolladas, destacando que entre los diversos factores que influyen estaría la fragilidad financiera de los consumidores, las instituciones financieras y los gobiernos.