Chile destina sólo el 5% de su presupuesto en tecnología a la seguridad informática

SANTIAGO.- Las actividades cibernéticas maliciosas, como la ciberdelincuencia y el ciberespionaje, tienen graves consecuencias económicas en todo el mundo, las que van desde el robo de datos, al robo de propiedad intelectual. Y mientras en el resto del mundo el gasto en seguridad se ha ido incrementando, en Chile aún permanece por bajo lo que recomiendan los expertos en seguridad informática.

Según datos entregados por McAfee y el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS en inglés), el costo de los delitos y espionaje informático en países como Estados Unidos puede llegar a los US$ 100 mil millones al año.

En el caso de Inglaterra, la estrategia de seguridad nacional situó a los ciberataques como una de las principales amenazas dentro del país, junto con el terrorismo y los desastres naturales, debido a que desde 2010 el gobierno ha perdido más de US$ 3 mil millones al año por causa del cibercrimen.

En América Latina, en tanto, la cifra en materia de pérdidas por delitos informáticos también resulta extraordinariamente alta y según especialistas, es probable que sea superior a las provocadas por otra forma de delincuencia, incluso el narcotráfico.

"Hoy la ciberdelincuencia y el ciberespionaje se mueven a través de verdaderas organizaciones criminales capaces de provocar desastres económicos en grandes empresas o atemorizar a diversos gobiernos con el robo y filtración de información sensible", señala Miguel Pérez, gerente general de NovaRed.

Situación en Chile

El CEO de la multinacional señala que dado a que los cálculos en pérdidas son millonarios y éstos se registran principalmente por el robo de capital intelectual e información confidencial de negocios, "se estima que las compañías y los gobiernos alrededor del mundo gastan alrededor de un 7% de sus presupuestos tecnológicos en materia de seguridad informática –unos US$ 60 mil millones–, creciendo a una tasa del 8% anual".

En Chile, se destinan US$ 4 mil millones anualmente a comprar artículos tecnológicos desglosados en: adquisiciones de hogares (30%), sector público (15%), sector privado (50%) y otros (5%). Del total de inversión, sólo un 5% - cerca de US$ 200 millones, corresponde a seguridad informática. Una cifra que se encuentra por debajo de la inversión que expertos señalan como ideal para enfrentar la ciberdelincuencia y sus cada día más sofisticadas tecnologías.

A pesar de esta situación, Pérez afirma que, en general, "Las organizaciones de América Latina y la demanda por servicios y sistemas de seguridad crece anualmente a tasas más altas que en los países desarrollados, llegando a un 20% aproximadamente al año. Esto debido, principalmente, a que las empresas han comprendido que la inversión en este ámbito es justamente eso, una inversión y no un costo".