JERUSALEN.- Israel rechazó este jueves el plan de paz saudita adoptado por la cumbre árabe de Beirut y su Gobierno tenía previsto reunirse a las 21.00 GMT para decidir sobre la represalia al atentado suicida palestino de la víspera, mientras el Presidente palestino, Yasser Arafat, se dijo dispuesto a declarar un alto el fuego inmediato.
Por la noche, tres colonos israelíes murieron en un ataque palestino en la colonia de Elon Moreh, cerca de Naplusa, al norte de Cisjordania, reivindicado por el Movimiento de Resistencia Islámica Hamas.
La muerte de 24 israelíes en menos de 24 horas ha llevado al Ejército israelí a proponer al Gobierno del Primer Ministro Ariel Sharón, una ofensiva a gran escala que podría comenzar en las próximas horas y se llevaría a cabo progresivamente, como un "rodillo".
El Ejército israelí ha cancelado todos los permisos y esta noche pedirá al Ejecutivo la autorización para un alistamiento parcial de fuerzas de la reserva, informaron medios locales.
Los altos mandos presentarán esta solicitud en una reunión del Consejo de Ministros que Sharon ha convocado con carácter de urgencia y que comenzó a las 23.00 hora local (21.00 GMT).
Tras el atentado del miércoles en la ciudad costera de Netanya, al norte de Tel Aviv, que dejó 20 muertos además del kamikaze, los palestinos temían la represalia del Ejército israelí, cuyo blanco sería Ramallah y el cuartel general de Arafat.
Sus oficinas fueron evacuadas, las escuelas cerraron sus puertas y los habitantes acudieron a toda prisa a las tiendas para abastecerse.
"Se ha cruzado una línea roja para siempre, pues inclusive en los últimos dieciocho meses, la Autoridad Palestina había mantenido un doble lenguaje y podía tenerse la esperanza de que optaría por la paz y no por la guerra", declaró a la AFP un portavoz del Ministerio israelí de Relaciones Exteriores.
"Ahora, las máscaras cayeron y vemos a la verdadera Autoridad Palestina", insistió Emmanuel Nachson. "Vamos a replicar pues tenemos un deber hacia nuestra población y un deber de legítima defensa, al cual, como Gobierno, no podemos renunciar", advirtió.
Según el mismo portavoz, el plan de paz adoptado el jueves por la cumbre de la Liga Arabe en Beirut es "inaceptable" en su forma actual pues llevaría a la destrucción del Estado judío. "No podemos aceptar el derecho al regreso (de los refugiados palestinos), pues ello conduciría a (la formación) de dos Estados palestinos", indicó.
Israel siempre rechazó el regreso de unos 3,7 millones de refugiados palestinos, argumentado que ello modificaría el equilibrio demográfico en favor de los árabes.
Hamas también rechazó la oferta de paz de la cumbre de la Liga Arabe, aunque reconoció algunos puntos positivos en el comunicado final de esta conferencia, "principalmente, el apoyo de los dirigentes árabes a la Intifada, la distinción entre terrorismo y resistencia y el acercamiento entre Kuwait e Irak".
En cambio, Estados Unidos saludó el plan de la Liga Arabe que ofrece a Israel la paz y la seguridad a cambio de su retirada de los territorios árabes ocupados desde 1967. Un responsable estadounidense lo calificó de "desarrollo positivo".
Confinado en Ramallah desde el 3 de diciembre por decisión del gobierno israelí, Arafat hizo saber a la cumbre de Beirut que "teme una reocupación inminente" de la ciudad.
La ciudad está rodeada por 150 tanques israelíes, afirmó el presidente de la Autoridad Palestina, citado por el jefe de su delegación en Beirut, Faruk Kaddumi.
El Ejército israelí volvió a ocupar Ramallah del 11 al 14 de marzo durante su mayor operación en los territorios palestinos desde que los ocupó en 1967.
En este contexto, Arafat se dijo dispuesto a hacer una declaración inmediata de alto el fuego e indicó que informó al emisario norteamericano Anthony Zinni sobre su disposición a aplicar el plan Tenet sobre una tregua con Israel.
"Estamos dispuestos al cien por ciento a aplicar el plan Tenet que debe llevar a la aplicación del plan Mitchell", añadió Arafat.
El viceministro israelí de Relaciones Exteriores, Michael Melchior, rechazó rotundamente la declaración de Arafat. "Esto no cambia nada, ya lo hizo 50 veces", afirmó.
Por la noche, un palestino entró en una casa de la colonia de Elon Moreh, cerca de Naplusa, en la que varios colonos celebraban la Pascua judía y mató a tres personas, informaron colonos y el segundo canal privado de televisión israelí.
Tras los recientes atentados, en el seno del Gobierno israelí se levantaron voces que reclamaron una represalia de envergadura luego del atentado de Netanya. El ministro israelí de Seguridad Interior, Uzi Landau, lo calificó de "crimen de guerra" y llamó a "destruir a la Autoridad Palestina".
