CIUDAD DEL CABO.- El ex Presidente sudafricano Nelson Mandela criticó hoy en duros términos los supuestos maltratos a los que soldados estadounidenses y británicos sometieron a prisioneros iraquíes, en un discurso ante el Parlamento en Ciudad del Cabo.
"Vemos cómo dos democracias líderes, dos naciones líderes del mundo libre, se involucran en una guerra que no fue respaldada por Naciones Unidas", señaló, y agregó en medio de aplausos: "Vemos con horror los informes que revelan terribles abusos a la dignidad de seres humanos detenidos por fuerzas invasoras en su propio país".
Mandela aseguró que cuando los países democráticos más fuertes manipulan las instituciones internacionales en detrimento de las naciones en desarrollo, hay motivos para la desesperación.
"En un mundo cínico nos hemos convertido en inspiración para muchos. Nosotros mostramos que el bien puede ser alcanzado entre los seres humanos que están preparados para confiar en la bondad de la gente", dijo el Premio Nobel de la Paz en la sesión especial del Parlamento en el décimo aniversario de su nombramiento como el primer presidente negro de Sudáfrica.
El discurso de Mandela, que cumplirá 86 años en julio, podría ser la última gran aparición pública del Nobel, ya que desde hace semanas los medios aseguran que luego de su cumpleaños el líder quiere retirarse a la vida privada.
Con respecto a los éxitos de la Sudáfrica multirracial post- apartheid, el ex presidente señaló: "Nosotros, el pueblo de Sudáfrica, creemos que Sudáfrica pertenece a todos los que viven aquí y que están unidos en su diversidad".
Por eso aseguró que no se debe olvidar la segregación racial, no para permanecer cautivos de ese pasado, sino para medir cómo ha progresado la sociedad.
También reconoció que la pobreza, el desempleo y la enfermedad siguen azotando al país. "Nada menoscaba tanto la dignidad de una persona como no ser capaz de encontrar trabajo y un sustento. El Sida sigue amenazando nuestro futuro de una manera especialmente atemorizante".
