LA PAZ.- El vicecanciller de Bolivia, Jorge Gumucio, indicó hoy que existen "avances positivos" en las relaciones de su país con Chile, que se intensificarán a partir de agosto con la celebración de varias reuniones bilaterales.
En unas declaraciones a la prensa en Cancillería, Gumucio hizo un balance de los contactos sostenidos en los últimos tiempos entre los gobiernos de ambas naciones en el que destacó la labor realizada por el canciller Ignacio Walker.
El alto funcionario sostuvo que "lamentablemente" con la canciller Soledad Alvear, la antecesora de Walker, "no hubo avances".
Sin embargo, con el actual ministro de Relaciones Exteriores chileno las relaciones "se han puesto nuevamente a mover" con una serie de conversaciones que calificó de "avances positivos".
Muestra de la aparente mejoría de la relación bilateral es la continuidad de reuniones que funcionarios de ambos países sostendrán a partir del 4 de agosto, día de una primera cita bilateral en la ciudad de Iquique, en el norte chileno.
El objetivo de este encuentro será fomentar el uso del puerto chileno de Iquique para el comercio internacional de Bolivia.
El 8 y el 9 de agosto, directores de distintas áreas de las dos cancillerías buscarán en La Paz la forma de "preparar una agenda común", a partir de las propuestas elaboradas por ambas partes y donde el principal punto de disenso es el pedido de Bolivia de incluir su reivindicación marítima en las conversaciones.
Bolivia demanda a Chile la restitución de un acceso al océano Pacífico perdido en una guerra del siglo XIX y que es la razón por la cual los dos Estados carecen de relaciones diplomáticas a nivel de embajador desde 1962, con un breve paréntesis entre 1975 y 1978.
"También vamos a tener una posible reunión sobre el Silala a fin del mes de agosto en Chile", anunció Gumucio al referirse a otro contencioso, en este caso a consecuencia del uso que empresarios del norte de Chile hacen de un manantial de agua en la frontera común, sobre el que Bolivia reclaman soberanía.
Además, los próximos el 15, 16 y 17 de agosto las ciudades bolivianas de La Paz y Santa Cruz serán escenario de varias entrevistas con autoridades chilenas para profundizar el Acuerdo de Complementación Económica (ACE-22) firmado en 1993.
Para Bolivia, el objetivo de esos encuentros será revertir la desfavorable relación comercial con la nación transandina.
Según las últimas estadísticas, en los primeros cinco meses de 2005, Bolivia exportó a Chile productos por un valor de 16 millones de dólares e hizo importaciones por 53 millones de dólares, lo que provocó un saldo de 37 millones en su contra.
