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Mueren 13 radicales islámicos en un ataque del ejército paquistaní

A finales de octubre, el presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, decidió desplegar en el valle a 2.500 soldados para hacer frente a los integristas.

07 de Diciembre de 2007 | 01:47 | EFE

LAHORE.- Al menos 13 integristas islámicos, entre ellos un comandante, murieron en un ataque con helicópteros del Ejército de Pakistán contra los feudos insurgentes del norteño valle de Swat, según informó hoy una fuente oficial.


Los helicópteros del Ejército atacaron las posiciones de las milicias del clérigo radical islámico Fazlullah, y causaron la muerte de su hombre de confianza, el maulana Shah Dawran, según informó el portavoz de las tropas, el general Waheed Arshad.


Las fuerzas de seguridad lograron penetrar en el cuartel general de Fazlullah, en la localidad de Mam Dherai, y destruyeron su casa, en la que había abundantes armas.


Según Arshad, la muerte de Shah Dawran es el segundo gran éxito de las tropas paquistaníes en la región, después de haber acabado hace dos semanas con otro dirigente integrista, Jan Kitab.


En la región, hasta hace poco un idílico destino turístico, las fuerzas de seguridad han detenido a 24 insurgentes en varios puestos de control, algunos de ellos con fuertes lazos con el maulana Fazlullah.


El líder integrista es conocido como el “maulana FM” porque utiliza una emisora de radio ilegal para lanzar discursos instando a los ciudadanos a empuñar las armas.


Después de haber conquistado dos feudos insurgentes en las últimas horas, el Ejército cree que Fazlullah se oculta en la ciudad de Peochar, situada en un área montañosa, con varios de sus combatientes islámicos.


Los insurgentes han tenido que retirarse a las montañas ante el empuje del Ejército, que ha destruido varios de los escondrijos de los radicales.


A finales de octubre, el presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, decidió desplegar en el valle a 2.500 soldados para hacer frente a los integristas.


Tanto en Swat, como en el cinturón tribal paquistaní, situado en la frontera con Afganistán, los atentados contra las fuerzas de seguridad son constantes.


Musharraf se escudó en el auge de la violencia islamista, entre otros motivos, para declarar el estado de excepción el pasado 3 de noviembre, al que tiene previsto poner fin el 16 de diciembre.

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