MADRID.- Un juez de Madrid ordenó que diez de los doce presuntos integrantes de una célula islamista radical detenidos en Barcelona durante el fin de semana permanezcan en la cárcel y explicó que tres de ellos iban a cometer atentados suicidas inminentes contra los transportes públicos.
El juez Ismael Moreno ordenó en cambio la liberación de otros dos de los detenidos, después de que la policía hiciese lo propio con otro par. En la operación policial del fin de semana fueron detenidos catorce hombres, doce paquistaníes y dos indios, de los que diez permanecerán encarcelados.
En su auto, el juez Moreno explica que los sospechosos integraban un grupo islamista radical "con una clara y especializada división de funciones". La célula había designado a tres de sus miembros, todos ellos paquistaníes, para "llevar a cabo diversas acciones terroristas suicidas el pasado fin de semana en transportes públicos de la ciudad de Barcelona".
El magistrado acusó a los diez detenidos de integrar un grupo armado y a tres de ellos además les imputó el haber planeado los atentados suicidas. Los acusados negaron todos los cargos durante su comparecencia ante el juez y la fiscalía este miércoles.
Tras las detenciones, el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo que se trataba de "un grupo de carácter islamista radical, con un nivel importante de organización", que estaba en la fase de pasar de la "radicalización ideológica" a las "acciones violentas". La prensa española señaló que los sospechosos planeaban acciones suicidas bajo las órdenes de la división paquistaní de Al Qaida.
