MANAGUA.- El destituido Presidente de Honduras, Manuel Zelaya, declaró este viernes en Nicaragua que está dispuesto a "dar la vida" para "derrocar al régimen golpista" que lo separó del poder el pasado 28 de junio.
Al recibir la antorcha de la independencia centroamericana en la hacienda San Jacinto, al norte de Managua, Zelaya dijo que seguirá luchando por recuperar el gobierno de su país, ahora dirigido por Roberto Micheletti.
"No descansaremos, no daremos tregua, no nos rendimos y si tenemos que dar la vida lo haremos por rescatar la democracia en Honduras, por derrocar al régimen golpista que hoy usurpa el poder en nuestra nación", afirmó.
Vestido con camisa blanca y su clásico sombrero vaquero, Zelaya acusó a Micheletti de haber "suprimido la libertad" y de haber establecido "una dictadura represiva" en Honduras.
"Los invasores y los que usurpan el poder quedarán bajo las llamas de los pueblos para ser condenados por la historia", dijo el desplazado gobernante, que concluyó su discurso exclamando: "Patria, restitución o muerte en Honduras".
"Mel" Zelaya recibió la antorcha centroamericana que recorre el istmo para conmemorar el 188 aniversario de la independencia de España y que por primera vez este año no cruzó territorio hondureño.
Estudiantes y maestros nicaragenses participaron en el acto oficial en San Jacinto, unos 20 kilómetros al norte de Managua, donde soportaron una intensa lluvia durante varias horas.
A la actividad asistieron, además, la canciller de Zelaya, Patricia Rodas, su ministro de Educación, Marlon Brevé, y el intelectual cubano Eusebio Leal, historiador de La Habana.
La Hacienda San Jacinto es un sitio histórico donde tuvo lugar una de las principales batallas de patriotas nicaragenses contra invasores de Estados Unidos dirigidos por el filibustero William Walker, en 1856.
