Recuerde la polémica agresión
BAGDAD.- El periodista iraquí que lanzó sus zapatos al ex Presidente estadounidense George W. Bush como protesta por la guerra en Irak, convirtiéndose en una estrella en el mundo árabe, fue liberado hoy de una prisión en Bagdad.
Muntazer Al Zaidi partió de una base naval iraquí, donde se encuentra la prisión, acompañado por varios integrantes del Parlamento, dijo su hermano Uday, que esperaba junto a otros parientes fuera de la casa de la familia en el centro de Bagdad.
Fuera de la casa de la familia todo era celebración, las mujeres gritaban y realizaban danzas tradicionales.
"Felicito al pueblo iraquí y al mundo musulmán, y también a todos los hombres libres del mundo por la liberación de Muntazer", dijo Uday a una multitud de periodistas. "Cada vez que Bush cambie de página en su vida se encontrará conque lo esperan los zapatos de Muntazer".
El Primer Ministro Nouri al-Maliki resultó muy avergonzado tras el incidente, pues se encontraba junto a Bush en una conferencia de prensa, cuando el reportero se levantó repentinamente de su silla y lanzó sus zapatos hacia el podio donde estaba. El ex Presidente salió ileso, pero tuvo que realizar dos movimientos bruscos para evitar ser golpeado.
El hermano de Al Zaidi dijo que el periodista viajará a Grecia el jueves para que le realicen exámenes médicos y por temores sobre su seguridad.
"Tiene miedo de perder su vida", dijo Uday, que agregó que hoy dormirá en un lugar no revelado. El hermano reiteró las acusaciones de la familia de Al Zaidi sobre que fue maltratado cuando estaba bajo custodia iraquí.
En total el periodista pasó nueve meses en la cárcel.
La protesta de Al Zaidi encendió los ánimos de millones de personas alrededor del mundo árabe, inconformes por las imágenes de destrucción y dolor tras la invasión estadounidense de Irak en 2003.
"¡Éste es tu beso de despedida, perro!", le gritó el periodista a Bush en árabe mientras le lanzaba sus zapatos. "Esto es por las viudas, los huérfanos y aquellos que murieron en Irak", continuó diciendo mientras lo detenían.
