MONTEVIDEO.- El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, sostuvo este miércoles que el reconocer al Presidente electo hondureño, Porfirio Lobo, depende de cada país, y no del organismo.
"A mi no me corresponde manejarlo en el sentido de reconocer o no reconocer a otro gobierno. Es una prerrogativa de los gobiernos soberanos, por lo tanto, eso lo decidirá cada gobierno", señaló Insulza sobre las distintas posturas que hay en el seno de la OEA sobre si reconocer o no el resultado de las elecciones del 29 de noviembre en Honduras.
Los países del Mercosur -Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- y Venezuela desconocieron el martes en la Cumbre del bloque celebrada en Montevideo los pasado comicios hondureños, y reclamaron la restitución de Manuel Zelaya, depuesto el 28 de junio.En cambio, Estados Unidos reconoció el resultado de la elección del 29 de noviembre y al mandatario electo Porfirio Lobo.El levantamiento de la suspensión de la OEA que pesa sobre Honduras podrá ser decidido con dos tercios de los votos de la Asamblea General, indicó Insulza, que visitó Montevideo para participar en un seminario organizado por la OEA y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) sobre la democracia en la región."Hay otro tema, que es distinto: la suspensión de que es objeto Honduras por la interrupción de la democracia, y ahí los países decidirán si a este gobierno lo reconocen o no", dijo Insulza."Se le puede levantar o no la suspensión. Eso lo decidirán los países a partir del 27 de enero", fecha en que Lobo asume, "y a partir de ahí cada país decidirá si lo reconoce o no lo reconoce"."Antes nadie va a reconocer a (Roberto) Micheletti", que asumió el gobierno hondureño tras el golpe de Estado contra Zelaya.La Asamblea de la OEA puede resolver levantar la suspensión con 22 votos de los estados miembros, es decir dos tercios, agregó Insulza, que atribuyó el fracaso en la mediación del organismo para restablecer la constitucionalidad en el país a los "límites" para actuar y a la falta de resultados de las sanciones impuestas."El multilateralismo tiene naturalmente límites. Nosotros no tenemos, y ningún país debería tenerlo tampoco, la facultad de intervenir en otro país, por mucho que se cometan este tipo de atropellos que se cometió con la democracia en Honduras", señaló."Naturalmente que un bloqueo económico o una acción militar deberían estar proscritas. A falta de eso, están las sanciones que podemos aplicar: la suspensión, el corte del crédito", pero "eso no consiguió" resultados, agregó."El gobierno de Micheletti se irá cuando se vaya, ojalá más temprano que tarde, pero a más tardar a fines de enero, y nadie lo va a haber reconocido como un gobierno legítimo. Eso no había pasado jamás" y "por lo menos constituye una sanción moral bastante importante", aseveró.yow/pz Uruguay-OEA-Honduras-política-golpe AFP 092101 GMT DEC 09