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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 10:00
BUENOS AIRES.- La producción de petróleo y gas en Argentina podría sufrir en las próximas horas una caída "drástica" si continúa la violenta toma del principal yacimiento del país en la localidad de Cerro Dragón, en la patagónica provincia de Chubut, alertaron hoy especialistas.
"Estamos ante un problema de dimensiones importantes. El abastecimiento va a caer drásticamente. La planta de Cerro Dragón es la más importante del país, lo que se está viviendo allí es muy serio", alertó el secretario general de la Federación de Petroleros, Alberto Roberti.
En el yacimiento de Cerro Dragón, explotado por Pan American Energy (PAN), se extrae el 15% del petróleo producido en Argentina. Además inyecta al sistema interconectado de gas nacional unos 4,5 millones de metros cúbicos por día.
El jueves fue tomado de forma violenta por unos 500 trabajadores de la construcción vinculados al sector petrolero que causaron graves desmanes y destrozos en el yacimiento, ubicado a 65 kilómetros de la ciudad de Comodoro Rivadavia. Reclaman por 40 despidos y un alza salarial del 23%, y no del 12% como acordó el gremio de la construcción.
La toma, "con una violencia y vandalismo extremo", paralizó el "100%" su producción de crudo y en un "40%" la de gas, informó hoy el CEO de PAE, Oscar Pietro.
El ejecutivo reclamó que "la Justicia actúe rápidamente para poder sacar a los invasores de adentro y poder retomar el control de la planta".
El gobernador de Chubut, Martín Buzzi, y el secretario de Seguridad nacional, Sergio Berni, solicitaron en la noche de ayer a la justicia federal que intervenga para desalojar la planta petrolera. Berni informó en tanto el envío de efectivos de la Gendarmería y de la Prefectura Naval al yacimiento.
El CEO de PAE informó en tanto que los trabajadores "destrozaron equipos de comunicación, tendidos de fibra óptica, y equipos de control". La paralización de la producción agrava la situación en el yacimiento porque "las cañerías de agua se están congelando", y el petróleo pesado "con el frío se transforma en una cosa muy dura para mover por las cañerías", alertó Pietro.
