Dirigentes de la agrupación terrorista reiteraron que buscan desarmarse y actuar dentro de la "confrontación democrática".
AFP (archivo)MADRID.- Horas después de que trascendió este sábado la decisión del grupo terrorista ETA de "desmantelar" sus estructuras para la lucha armada, el Gobierno español afirmó que solo espera de la agrupación su "disolución incondicional".
"Cualquier otro comunicado no merece ninguna valoración", añadieron fuentes de Interior.
Así reaccionó el Ministerio del Interior hispano al adelanto de una declaración pública de la organización vasca fechada el 15 de julio pasado, en la que afirma que comenzó a realizar un "profundo proceso de transformación" para llevar a cabo "el tránsito del ciclo de la confrontación armada a la confrontación democrática".
Al respecto, la cartera del Gobierno hispano señaló que lo único que espera de ETA es "el desmantelamiento de todas sus estructuras criminales".
También restó importancia al documento de la organización armada, debido a que "no contiene ninguna novedad".
"Proceso de paz"
ETA reveló que dentro de sus acciones se cuenta permitir el "sellado verificado" de sus depósitos de armas, tal como había acordado en marzo pasado. También mencionó la voluntad del grupo de "propiciar conversaciones" con el fin de hacer "avanzar el proceso de paz".
La organización violentista, responsable de más de 800 asesinatos desde su fundación, exploraba este año tratativas en las que han intervenido Jonathan Powell, quien fue jefe de Gabinete del ex Primer Ministro británico Tony Blair, y Martin McGuinness, viceprimer ministro de Irlanda del Norte y dirigente del Sinn Féin, brazo político del IRA.