PARÍS.- A siete se elevó el número de muertos tras derrumbarse ayer domingo un edificio de cuatro pisos en la periferia de París, a causa de una explosión probablemente provocada por una fuga de gas.
El cuerpo de la última víctima fue hallado este lunes por los bomberos en medio de los escombros. Se trata de una mujer de unos 80 años.
Los equipos de socorro siguen buscando a un último desaparecido, un hombre de 50 años, aunque -según el prefecto Philippe Galli- las posibilidades de hallarlo con vida son "muy muy pequeñas".
Once personas resultaron heridas, entre ellas cuatro de gravedad, en la explosión del edificio el domingo por la mañana en Rosny-sous-Bois, en la periferia este de París.
Entre los muertos, además de la octogenaria, hay una madre de familia de 40 años y sus dos hijos de 14 y 18 años. También hay otro adolescente de unos 15, una mujer de 45 años y otro adulto.
El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, dijo La explosión destrozó la fachada y dejó al descubierto el interior de los apartamentos del edificio.
