ANKARA.- Las autoridades turcas detuvieron hoy al dueño y titular de la licencia de explotación de la mina de carbón de Ermenek, en el sur de Turquía, donde un accidente
hace doce días dejó atrapados a 20 trabajadores.
Saffet Uyar, principal propietario de la mina, ha acudido hoy voluntariamente junto a su abogado a la policía donde se ha entregado, según el diario "Hürriyet".
Uyar estaba en búsqueda y captura desde ayer, cuando las autoridades ordenaron la detención de ocho responsables de la mina, pero él fue el único al que no se pudo localizar.
Los otros siete detenidos anoche, entre quienes están dos copropietarios, el director general, el administrador y varios ingenieros, están todavía respondiendo a los interrogatorios y cuando finalicen, serán enviados a juicio.
Mientras tanto, las labores de rescate y achique de agua continúan en la mina, donde, según apunta un informe preliminar de la Fiscalía, se produjo una avalancha de agua acumulada en galerías antiguas fuera de uso que estallaron debido a la presión.
Quedaron enterrados o atrapados 20 mineros que se hallaban en el fondo del pozo, de una profundidad de 375 metros, y hasta ahora sólo se han podido recuperar dos cadáveres, y hay escasas esperanzas de encontrar supervivientes.
Las minas de carbón turcas son las más peligrosas del mundo, con una media de seis muertos por cada millón de toneladas de carbón extraído, una tasa 30 veces por encima de países con un nivel de desarrollo equiparable.
