CONCEPCION.- Un delincuente sexual en serie que durante los últimos meses sembró el terror en la ciudad de Talca, identificado con la iniciales M.L.G., de aproximadamente 35 años, fue detenido en las últimas horas por oficiales de Investigaciones. El delincuente trabajaba como bodeguero y posee antecedentes penales por abusos deshonestos, en la Séptima Región, a comienzo de los 90.
Los detectives ejecutaron la diligencia en Concepción, donde se había ocultado en días recientes para eludir la acción de la policía y de los tribunales.
Al ser capturado el inculpado, en el mercado penquista, entregó una identidad falsa, por lo cual su nombre tuvo que ser comprobado mediante exámenes dactilares. M.L.G. es casado y con hijos. Se desempeñó como obrero y conductor antes de emplearse de bodeguero, bebía alcohol en forma habitual y visitaba, con cierta frecuencia, clubes nocturnos y prostíbulos.
Sus abusos guardan cierta similitud con las de Julio Pérez Silva, el homicida y agresor sexual en serie de Alto Hospicio; y del llamado "Sicópata de La Dehesa", Roberto Martínez Vásquez, alias "El Tila".
Las amenazaba con cuchillos
Las pesquisas de la policía civil indican que M.L.G., perpetró un total de siete ataques en Talca, entre los meses de abril y junio del año en curso.
Las víctimas fueron dos niñas de apenas 15 años y cinco mujeres adultas: dos de 20 y las restantes de 24, 28 y 29 años de edad, respectivamente.
Algunas de las afectadas fueron blanco de violaciones consumadas, mientras que otras enfrentaron tocaciones y otros abusos sexuales.
El "modus operandi" fue el mismo que usó con todas sus víctimas, a quienes las abordó en plena calle y las amenazó con un cuchillo por la espalda.
Después de poner la hoja cortopunzante en las gargantas o rostros de las afectadas, las conducía a sitios eriazos o lugares oscuros, donde dio rienda suelta a sus cobardes perversiones.
Retrato hablado
Los oficiales que siguieron los pasos del individuo contaron con una retrato hablado confeccionado a partir de los testimonios de todas las víctimas, cuyas descripciones fueron coincidentes.
Las mujeres atacadas hicieron ver que el hombre tenía bigotes y pelo largo, además de un vistoso lunar en una pierna. Recordaron, además, que hablaba con voz de tono grave fingiendo y que su estatura fluctuaba entre un metro 70 y un metro 75 centímetros.
Tras ser arrestado en Concepción, el atacante fue llevado a Talca, donde quedó a disposición del fiscal Carlos Palma, según la modalidad de la reforma Procesal Penal.
