Desazón embarga a familiares tras fallido intento por contactar refugio minero

COPIAPÓ.- Rostros de desconcierto y tristeza fueron la tónica entre las familias de los atrapados en la mina San José, luego de que se comunicara que la sonda más avanzada no hizo contacto con el refugio donde se piensa estarían los 33 trabajadores.

Tras la cita con los parientes afectados, el ministro de Minería, Laurence Golborne, confesó que "hay frustración, rabia y desesperanza, porque la situación no es fácil".

Sus palabras y las del Presidente Sebastián Piñera representaron un "duro golpe" para las familias, que culparon a la empresa San Esteban por los contratiempos, ya que "nunca entregó una información clara".

"Es una mala la noticia. Aquí todos están trabajando a ciegas, porque no tienen ningún plano actualizado, están perforando y perforando y esperando que, si Dios es grande les diga 'allá es el lugar'", reclamó uno de los familiares.

Su percepción se sustenta en los dichos del experto Andrés Sougarret, quien aseguró que con la "mala información" que se cuenta "es difícil tomar una decisión precisa".

"Nos complica otra vez el tema porque teníamos la plena confianza de que íbamos a andar bien y ese sondaje iba a acertar al refugio", comentó otro familiar de los mineros, a quien se sumó una mujer que confesó que "lo único que quiero es que los rescaten e irme del campamento".

Pese al desconcierto que los embarga, la mayoría concuerda en que "la fe sigue bien en alto", ya que "esto aún no termina (...) y están vivos".

"Seguimos con la esperanza y con la fe intacta. Duele mucho, pero somos fuertes, por algo somos hijos y hermanos de mineros luchadores, así que no nos doblegaremos", aseguraron.