Los gendarmes acusados de corrupción ingresan esposados a la audiencia realizada esta tarde.
Luciano Riquelme, El MercurioSANTIAGO.- Incomunicados y en prisión preventiva quedaron tres de los cinco gendarmes acusados de integrar una red de corrupción para otorgar beneficios ilegales dentro de las cárceles.
En la postergada audiencia de formalización por asociación ilícita de cohecho que hoy sí se llevó a cabo, la jueza del Noveno Juzgado de Garantía de Santiago, Soledad Orellana, decretó esta medida para los funcionarios Carlos Barra Becerra, Ángel Silva Carumán y Alamiro Beltrán Toledo.
Para los otros dos funcionarios imputados por el mismo delito, Luis Alfaro y Abel Godoy, la magistrado ordenó arresto domiciliario total.
Durante la audiencia, la fiscalía presentó pruebas de audio en las que se escuchaba a los funcionarios realizando tratativas con reos que buscaban obtener beneficios carcelarios.
Los hechos fueron investigados a partir del 20 de junio de 2010 y, según el Ministerio Público, se pudo establecer que existió una vinculación para cometer delitos de cohecho. Entre éstos, se cuentan ingreso de celulares y drogas a penales, además de visar cambios de cárceles a cambio de altas sumas de dinero cobradas a familiares de reclusos.
La jueza decretó un plazo de 90 días de investigación, quedando fijada una próxima audiencia para el 14 de enero, a las 9:00 horas.