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Santiago: Jueves 25 de abril del 2024 | Actualizado 09:10
SANTIAGO.- "Hay gente que está desinformada y que tampoco hace mucho esfuerzo en informarse". Esa fue la respuesta del gobernador de la provincia de Última Esperanza, Max Salas, a las voces críticas que acusan al Gobierno de "reaccionar con lentitud" al incendio que arrasa con el Parque Nacional Torres del Paine.
En conversación con Emol, la autoridad aseguró que a 40 minutos de identificado el siniestro "ya se estaban requiriendo los medios aéreos y el personal de apoyo nacional e internacional para trabajar en esta materia".
"El martes a las 18:30 horas se observó la columna de humo en el sector Olguín, del Lago Grey, donde no hay acceso vehicular y tiene muy difícil conectividad marítima dadas las condiciones de viento de 100 km/h. Luego, tres brigadistas y dos carabineros se dirigieron al lugar y declararon la alerta. A las 19:10 se constituyó el comité de emergencia de la gobernación provincial de Última Esperanza y luego la Onemi decretó la alerta roja", detalló.
Y agregó: "La llegada del material que arribó hoy (viernes) se debe a que fue solicitado el mismo día martes en la noche, por lo que no hubo retardo en la petición de refuerzos ni tampoco en el alto mando en autorizar. La demora se debe a que los recursos (técnicos y humanos) están a 4.000 kms de distancia y están alistados en otras emergencias del país".
Su defensa a la acción del Ejecutivo responde a los cuestionamientos del coordinador del grupo Acción Ecológica, Luis Mariano Rendón, quien calificó como "una vergüenza" la cantidad de militares chilenos en comparación con los brigadistas argentinos.
En la misma línea, la alcaldesa del municipio de Torres del Paine, Anahí Cárdenas, subrayó a este medio que "se están agotando todos los recursos", por lo que "esas críticas no las tomaría en cuenta".
Al mismo tiempo y tras encabezar el Comité de Contingencia en la Onemi, el Presidente Sebastián Piñera reiteró las complicaciones que enfrentan los brigadstas en el trabajo de control de los seis frentes activos de incendio.
"La topografía del lugar es agreste, las condiciones climáticas adversas; grandes vientos con direcciones cambiantes que impiden anticipar su evolución; y gran cantidad de humo, que cubre casi toda la zona afectada y dificulta hacer un diagnóstico adecuado", señaló.
Haciendo hincapié que es el tercer gran incendio que ocurre en el Parque Torres del Paine, el primero de ellos en 1985, el segundo el año 2005 y este es el tercero en la zona.
"Tenemos plena conciencia del valor y la importancia que tiene Torres del Paine para Chile y el mundo entero y, por tanto, hemos tomado y seguirems tomando todas las medidas necesarias y dispuesto todos los recursos necesarios para poder combatir este siniestro con la mayor eficacia, dadas las condiciones del tiempo", aseveró.
