El proyecto contempla un periodo de 12 meses para el retiro de los cables.
Héctor Yáñez, El Mercurio
SANTIAGO.- Este jueves diversas autoridades oficializaron la continuidad de la tercera etapa del plan que busca reducir la contaminación visual de la Región Metropolitana mediante el retiro del cableado eléctrico en desuso.
El proyecto comenzó en Maipú en 2011 y permitió el retiro, ese año, de más de 25 toneladas de cables. Posteriormente, se sumaron las comunas de Calera de Tango e Independencia y en esta nueva fase se agregaron Santiago, Melipilla y Pedro Aguirre Cerda.
Con la presencia de la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá; el Ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gómez-Lobo; el Intendente, Claudio Orrego; el subsecretario de Telecomunicaciones, Pedro Huichalaf, y el seremi de Transportes, Matías Salazar, se entregaron antecedentes del plan de despeje de cables.
"Es un trabajo fundamental que nos permite recuperar el entorno urbano y los barrios, retirando este material que no sólo afecta estéticamente, sino que también puede afectar la seguridad. Por eso lo estamos impulsando en conjunto con los gobiernos regionales, los municipios y la industria", señaló el ministro Gómez-Lobo.
Por su parte, el intendente Orrego informó que "de todos los cables que vemos en nuestro paso por la ciudad, cerca del 40% no tiene uso. Esto hace que Santiago se vea sucio y desordenado".
Los trabajos en la comuna de Santiago comenzaron el 20 de mayo y tienen contemplados un mínimo de 12 meses para terminar. La coordinación general del plan está en manos de la Intendencia Metropolitana y la Seremi de Transportes y Telecomunicaciones, mientras que el trabajo operativo de despeje lo realizan las diversas compañías de telecomunicaciones y eléctricas que operan en la capital.
"Este plan lo que ha hecho es ordenar una colaboración entre las distintas empresas de telecomunicaciones que tienen esta obligación, de manera que establezcan territorios para el retiro paulatino de estos cables. Aquí lo que se genera es una gran contaminación, un factor de inseguridad y una sensación de abandono", opinó la alcaldesa Tohá.
Objetivos
El primer cuadrante de despeje estará terminado en dos semanas más e incluye a Balmaceda por el norte, San Pablo por el Sur, Matucana por el poniente y la Norte-Sur por el Oriente.
De manera especial la empresa Movistar está trabajando en la recuperación de cables en fachadas de edificios de alto valor patrimonial en el cuadrante Alameda-Agustinas-Matucana y Cumming y en edificios del sector Alameda-Molina-Gorbea y Exposición.
Iniciativas como el "Plan de despeje de cables" contribuyen a mejorar la calidad de vida de todos quienes habitan la ciudad, generando un Santiago más limpio, con menos contaminación visual y contribuyendo a construir una ciudad que provea espacios públicos que inviten a la ciudadanía a apropiarse de sus calles y barrios y a integrarse en espacios amables y seguros.
