SANTIAGO.- En medio de fríos aplausos para los jugadores y fuertes abucheos para el técnico Nelson Acosta, llegó a Santiago la selección chilena de fútbol, tras la contundente derrota por 4-1 ante Argentina en el debut de la eliminatorias mundialistas.
Tras la llegada de los jugadores al aeropuerto capitalino, los hinchas aplaudieron escasamente al plantel local, que anoche con un bajo desempeño cayó ante los albicelestes sin poder cambiar la historia de ganar alguna vez en canchas argentinas.
Uno de los momentos más tensos se produjo cuando varios hinchas comenzaron a abuchear a Acosta, lo acusaron de "defensivo" e incluso le pidieron la renuncia a través de monedas que le fueron arrojadas, por lo que el técnico debió subir fuertemente custodiado por la policía al bus dispuesto para el selecionado.
Por su parte, el plantel reconoció la mala actuación anoche en Buenos Aires, pero atribuyó la derrota en gran parte a la superioridad de los jugadores argentinos.
El defensa Javier Margas señaló que "ahora hay que levantar cabeza y trabajar para que las cosas salgan bien de aquí en adelante".
Por el momento, Chile permanece en el décimo y último lugar del proceso eliminatorio y deberá prepararse para tomar revancha frente a Perú el próximo 26 de abril en Santiago.
