LONDRES.- El delantero inglés Wayne Rooney vivirá mañana su propio "día D" cuando los médicos de la selección inglesa decidan si podrá jugar o no el Mundial, tras los análisis que le fueron efectuados hoy en Manchester.
"Soy optimista al trescientos por ciento. Rooney jugará", afirmó desde Alemania el DT Sven-Goran Eriksson, aunque ni los médicos ni Rooney realizaron declaraciones tras la nueva radiografía efectuada en el hospital Whalley Range.
Los médicos analizarán los resultados y mañana se anunciará si Rooney, de 20 años y pieza clave de la selección, podrá recuperarse de la fractura de metatarso en su pie derecho, que sufrió hace cinco semanas, en un partido ante Chelsea.
El atacante de Manchester United dejó hoy la concentración alemana de Baden Baden y viajó a Inglaterra con el director general de la Asociación local (FA), David Davies, para realizarse los análisis que decidirán su situación.
El médico de la selección, Leif Sward, discutirá el caso con sus colegas de Manchester United, Tony Gill y Rob Swire, y del hospital Whaley Range, en medio de una reserva absoluta, pero del escepticismo de prensa y aficionados es cada vez mayor.
Si Rooney no se recupera a tiempo, Eriksson lo reemplazará en el plantel mundialista con el atacante del Tottenham Jermain Defoe, quien también viajó a Alemania junto con el resto de la selección.
El atacante de Manchester permaneció hoy apenas veinte minutos en el hospital, acompañado también de su novia, Coleen McLoughlin, con quien salió en un automóvil con vidrios oscuros y sin hablar con la prensa.
Los pronósticos más optimistas indican que Rooney sólo podría estar plenamente recuperado para el 24 ó 25 de junio, es decir, una vez terminada la primera fase y para el primer juego de la segunda ronda, si Inglaterra logra clasificar.
