Los dos goles de Maradona a Inglaterra
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| Pensando en el turco |
¿En quién pensaba Maradona mientras enfilaba hacia el arco inglés dejando rivales en el camino? En su hermano Hugo. Al menos eso asegura el ídolo trasandino.
En 1981, en un amistoso ante Inglaterra en Wembley, el volante hizo una jugada similar, pero al enfrentar al portero la tocó a un costado y perdió el gol por poco. "El 'Turco' me llamó y me dijo: '¡Boludo!, no tendrías que haber tocado... Le hubieras amagado, si ya estaba tirado el arquero'".
El '86 le hizo caso. "Definí la jugada como mi hermano me había dicho", recordó Maradona. Y fue gol. |
SANTIAGO.- La pelota la tiene el argentino Héctor Enrique. Retrocede unos pasos y la cede a Diego Maradona, quien, en mediocampo, la pisa con la zurda y gira rápido hacia su derecha. Atrás quedan los ingleses Peter Reid y Peter Beardsley. Lo ve pasar también Terry Butcher, cuando el 10 lo amaga hacia la izquierda. A la entrada del área se le cruza Terry Fenwick, pero Maradona es un misil que pasa por su derecha. El uruguayo Víctor Hugo Morales ya lo trata de "genio" mientras relata la jugada con emoción única, pero genio es poco para lo que viene después, porque el volante argentino amaga otra vez a la derecha y el portero Peter Shilton ya no es obstáculo. Pese al foul de Butcher, Maradona la empuja al fondo del arco. El gol del siglo.
Como reza el dicho, las palabras se hacen polvo al ver la imagen. ¡Y cuántas veces la hemos visto! El pequeño volante de 1,66 metros, pasando entre ingleses varios centímetros más altos, pero incapaces de frenarlo, inmóviles testigos de la mejor definición del fútbol sudamericano, mezcla de picardía y talento puro.
Pero es injusto hoy, a 20 años de aquel 22 de junio, sacar ese gol de su contexto futbolístico e histórico, que, en el global, constituye el momento que catapultó a Maradona como uno de los mejores jugadores del mundo.
Eran los cuartos de final del Mundial de México 1986. El estadio Azteca, con 114 mil espectadores, era testigo de la consagración del astro argentino, tal como en 1970 había visto el espectacular fulgor de uno brasileño: Pelé. Un estadio bendecido, diríamos.
Inglaterra llegaba a ese partido tras una cómoda victoria sobre Paraguay por 3-0. Argentina en cambio, había sufrido para derrotar a Uruguay por la cuenta mínima, en el partido donde se han contabilizado más fouls (65) en la historia de los mundiales, según recuerda hoy José Luis Fernández, director del Centro de Estudios del Deporte.
Además, el plantel trasandino no pasaba por buenos momentos. No eran favoritos, Carlos Bilardo era duramente cuestionado en su puesto de DT y se decía que, salvo Maradona, el equipo no tenía otra figura.
Así y todo, ése 22 de junio salieron a cambiar la historia. Estaba escrito, antes del duelo, que Argentina nunca le había ganado a Inglaterra en un Mundial. En Chile 1962 cayeron por 3-1 (partido jugado en Rancagua), y en el Mundial de 1966, los ingleses se impusieron jugando de local por 1-0, en un partido que también dio que hablar por la expulsión del capitán trasandino Antonio Rattín, quien demoró cerca de 10 minutos en irse a los vestuarios e incluso se burló de la Reina. Después de ese incidente, la FIFA decidió crear las tarjetas amarilla y roja, para que no quedaran dudas cuándo un jugador era expulsado.
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| Lo que dijo Maradona |
"Fue un lindo gol pero no una maravilla. Raquel Welch es una maravilla, no un gol" ("Diego Dijo")
"Había hecho el gol de mi vida. Y me dio mucho placer el otro, también. A veces siento que me gustó más el de la mano, el primero" ("Yo soy el Diego")
"Ahora siento que puedo decir algo que no pude decir entonces. Entonces lo llamé 'la mano de Dios'. No fue la mano de Dios, fue la mano de Diego! Y me sentí como si estuviera robando a los ingleses". ("Yo soy el Diego") |
La trampa y la obra maestra
En el campo de juego dos estilos opuestos que en el primer tiempo no se hicieron mayor daño.
Fue en la segunda fracción donde comenzó a gestarse la obra maestra. Maradona comandaba los ataques trasandinos. En uno de esos arranques, en el minuto 51', buscó una pared con Jorge Valdano, pero Steve Hodge se interpuso y despejó erróneamente hacia su propio arco. El 10 argentino fue en busca del balón y saltó junto al portero Shilton. Sólo con su brazo izquierdo alzado el volante pudo superar al arquero. Golpeó el balón y lo mandó al fondo del arco.
La mano la vieron todos menos el juez tunecino Alí Bennaceur quien validó la conquista, pese al reclamo de los ingleses. Ni los compañeros de Maradona lo creían mientras éste los llamaba a celebrar el gol, como si nada hubiera pasado. "Lo juro por lo que más quiera, salté junto a Shilton, pero le di con la cabeza. Se vio el puño del arquero, pero fue de cabeza, si hasta me quedó un chichón. Lo hice con la cabeza de Maradona, pero con la mano de Dios", dijo el astro tras el partido, poniéndole la firma.
Pero la obra aún no estaba completa. Como queriendo resarcirse de la pillería, como para acallar todas las voces críticas, Maradona selló su tarde de gloria. Cuatro minutos después, recibió el balón en la mitad del terreno, corrió 60 metros en 10 segundos y alcanzó la gloria personal. Hace algunos años la FIFA lo eligió como el gol del siglo.
"Es el estilo sudamericano expuesto en toda su magnitud", dice Fernández. "Por un lado la trampa, con la 'Mano de Dios', pero también la genialidad hecha práctica. Ese partido marcó la diferencia entre el fútbol europeo y el sudamericano. En el minuto 51, lo tramposo, lo pillo, y cuatro minutos después, lo lapidario, todo el talento".
El descuento inglés sólo permitió a Gary Lineker transformarse en el goleador de ese Mundial. 20 años después, el emblemático delantero inglés entrevistó a Maradona para la BBC. "Fue mi mano", le reconoció el argentino.
Más allá de la controversia que hasta hoy se discute, para el 10 trasandino fue un partido inolvidable, como escribió en su autobiografía "Yo soy el Diego". "22 de junio de 1986, otro día que no voy a olvidar mientras viva, nunca. Por todo lo que representaba, jugábamos una final contra Inglaterra. Si bien nosotros decíamos que no tenía nada que ver con la Guerra de las Malvinas, sabíamos que habían muerto muchos pibes argentinos allá, que los habían matado como a pajaritos", escribió. Y lo describió muy bien. Para Argentina ése no era sólo un duelo por cuartos de final. Era un partido decisivo por lo ocurrido cuatro años antes en las islas inglesas.
Y además, fue el encuentro clave del Mundial. Tras ése partido, Argentina sintió que podía salir campeón. Vinieron Bélgica (2-0) y Alemania (3-2), pero ya Argentina era imparable, y llegó la gloria para un país entero: levantar la Copa del Mundo.
Los protagonistas
Peter Shilton, portero de Inglaterra en México 86
"Creo que es triste. No me gusta verme asociado con ese incidente, en el que el jugador más grande del mundo, en mi época al menos, hace trampa, se sale con la suya y nunca confiesa o se disculpa".
Héctor Enrique, autor del "último pase"
"Recuerdo que después del partido, en el vestuario todos felicitaban a Maradona por el gol que había hecho y nadie me felicitaba a mí por el pase que le di. Y de ahí quedó ese dicho para la historia. Todo el mundo me dice 'gracias por el pase que le diste a Maradona'. Y hasta Diego me lo agradeció, porque en su libro me escribió una dedicatoria que dice 'gracias Negro por el pase'. Es el mejor gol de la historia de los Mundiales y yo creo que no va a haber otro igual".
Mundial México 1986
Argentina 2
Inglaterra 1
Goles: 51’ Diego Maradona 1-0; 54’ Diego Maradona 2-0; 80’ Gary Lineker 2-1
Árbitro: Ali Bennaceur (Túnez)
Estadio: Azteca
Asistencia: 114.580
22 de junio de 1986, cuartos de final
Los cinco duelos mundialistas entre Argentina e Inglaterra
Chile 1962, fase grupal
Inglaterra 3 – Argentina 1
Inglaterra 1966, cuartos de final
Inglaterra 1 – Argentina 0
México 1986, cuartos de final
Argentina 2 – Inglaterra 1
Francia 1998, octavos de final
Argentina 2 – Inglaterra 2 (gana Argentina 4-3 en penales)
Japón-Corea 2002, fase grupal
Inglaterra 1 – Argentina 0
¿Opciones de que ambos equipos se enfrenten en Alemania 2006? Sólo después de las semifinales...
