Está viviendo en carne propia el prejuicio de las bellas.
Recién estrenada en la soltería, Megan Fox asegura tener la sospecha de que nadie se le acerca para “tener una conversación intelectual”.
La joven actriz está en el centro de la noticia a sus cortos 23 años. Por segundo año consecutivo fue considerada por la revista FHM la mujer más sexy del mundo. Y claro que lo es.
Y quizás por ello, es que las historias en torno a su vida privada han comenzado a bullir como lava de volcán. Aunque ella no ayuda mucho a detenerla porque se ha hecho fama de emitir declaraciones poco afortunadas.
De hecho, hace pocos días afirmó que nadie va a ver la película “Transformers” precisamente por las actuaciones –lo que no deja de ser cierto- y se ganó las iras del director.
Pero años atrás las cosas fueron peor. En la revista “GQ” confesó que después de que un novio juvenil la dejara, ella se obsesionó con una estriptisera rusa llamada Nikita.
En su singular declaración, señaló que “decidí que estaba enamorada de esta chica que trabajaba en un club de strippers de Sunset Boulevard; decidí también que ella me amaría y me salí de mi camino para crear una relación con esa chica”. “Olía a vainilla, tenía un pelo liso y largo, realmente me gustaba”, continúo.
Y aunque en esa misma ocasión aclaró que no era lesbiana, las interpretaciones sobre su bisexualidad no cambiaron. Sí, porque su aclaración fue acompañada de una frase ambigua: “Sólo creo que todos los seres humanos nacieron con la habilidad de ser atraídos por los dos sexos. Lo que quiero decir es que puedo verme teniendo una relación con una chica”.
El primer novio conocido de Megan, un bombero llamado Ben Leahly, no ayudó mucho tampoco cuando afirmó que la bella actriz gustaba de fantasear con Angelina Jolie. “Había veces en que se quedaba por horas mirando una revista y diciéndome qué actriz encontraba atractiva”, aseguró.
Pese a la imagen que se ha creado, los hechos reales dicen otra cosa. A los 18 años se emparejó con el actor Brian Austin Green, conocido por la serie “Beverlly Hills 90210”. Juntos estuvieron, sin dar mayor escándalo, hasta febrero de este año.
Ambos se conocieron en las calles de Los Ángeles en 2004 y se comprometieron dos años después -Megan incluso llegó a confidenciar que quería una boda íntima-, pero todo acabó en una linda amistad.
Hoy, en plena soltería, dice no tener claridad sobre si quiere casarse algún día. “En este momento no hay espacio en mi cabeza en cuanto a quién será mi próximo novio”, dijo a revista “Cosas”.
“No quiero terminar como Elizabeth Taylor”, agregó, al precisar que antes de volver a emparejarse quiere crecer para no volver a repetir relaciones fracasadas. “No sé nada acerca de la soltería. Me he aislado, me he forzado a estar quieta”, aseguró.
Aunque en la misma entrevista volvió a reiterar que su obsesión con algunas mujeres no implica que sea bisexual, muchos no dejan de recordar otra frase memorable en la revista “Heat”: “cada vez que termino un romance me digo a mi misma ´si pudiera ser la novia de Angelina sería muy feliz´”.