|EMOL|El Mercurio|Las Últimas Noticias|La Segunda|Diarios Regionales|Avisos Económicos|
Index

Historia de amor

Atracción por las mayores

Foto

La loca carrera de éxitos que había empezado a los 16 años, cuando Andre Agassi decidió ser profesional y que lo llevó a número tres del mundo sólo un año después de haber ganado su primer torneo, Itaparica 1987, se volvió literalmente una locura cuando el tenista conoció a la actriz Brooke Shields.

Ya en 1988, Agassi era el jugador más joven en superar la marca del millón de dólares, con sólo 43 torneos en el cuerpo. Su siempre ascendente carrera nunca tuvo relación con la imagen de rebelde que el deportista quería mostrar en todo momento: pelo largo, un aro, ropas coloridas (que en ese tiempo no se usaban en el circuito internacional) y sus desafíos constantes a las tradiciones del tenis.

Tal vez fue esa misma rebeldía y los ambientes que acostumbraba frecuentar en la farándula estadounidense lo que lo hicieron perder un poco el rumbo.

El primer rumor de moda fue que "AA" vivía un romance con Barbra Streissand. Y todo se confirmó cuando la actriz y cantante seguidora de Buda se asomó por las tribunas de Flashing Meadows y le dedicó elogiosas palabras: "Es muy, muy sensible, muy maduro. Juega como un maestro zen", afirmó.

La relación no duró mucho, quizás por la diferencia de edad: en ese entonces Agassi tenía 22 años y Streissand, 50.

Pero ese fue el punto de partida que lo llevó al punto más bajo de su carrera, al conocer a una de las actrices más bonitas de Hollywood, Brooke Shields –eternamente recordada por su rol en la adolescente cinta "Laguna Azul" y por asegurar que quería llegar virgen al matrimonio -.

En 1993, la actriz tomó la iniciativa y le mandó una carta al tenista (cinco años menor que ella) en la que le decía que quería conocerlo. El hecho es que Andre Agassi perdió la cabeza por la actriz que, según las malas lenguas del cine, era ferozmente controlada por su madre a la que sólo le importaba el dinero.

Se conocieron en 1994 y el tenista dejó casi de lado su carrera para seguir a Brooke. Comenzó a jugar golf, salía de noche, participaba de los eventos a los que debía concurrir su novia. Es decir, todo aquello que está totalmente prohibido para un jugador de su talla.

Ella tampoco lo hacía mal: no se perdía partido y le daba ánimos a su pareja desde las graderías. Era un amor de cuento, de esos que tanto les gusta a la prensa del corazón, la actriz bella y famosa y el tenista millonario y talentoso.

FotoEn 1997 decidieron casarse. La madre de Brooke le solicitó firmar un acuerdo económico prenupcial; Agassi se opuso, pero lo que apareció en los titulares de la prensa sería un indicio de lo que vendría después. Él tenía 27 años; ella, 32.

Pese al amor que parecían tenerse, la vida familiar no fue fácil y repercutió seriamente en el rendimiento del deportista; 1997 fue un muy mal año para él.

Luego comenzaron los rumores de infidelidades de la actriz, lo que hizo que Agassi entrara en una gran depresión. Abandonó importantes torneos y se alejó completamente de los entrenamientos. Si en 1996 había terminado 8 en el ranking ATP, después de haber estado tres semanas como Top One, el '97 fue aún peor: finalizó el año en el lugar 122 e incluso, luego bajó del 150. Agassi pidió el divorcio, que le fue concedido en 1999. "El amor no es suficiente para que un matrimonio funcione", explicaba entonces el deportista.

Imprimir Enviar
Terminos