Nuevamente Charlize tuvo que levantar la cabeza y con el aliento y apoyo incondicional de su madre emprendió rumbo a Los Ángeles en busca de alguna oportunidad en el mundo de la actuación.
Recién arribada y sin ningún contacto ni experiencia, mientras Charlize recorría las calles del Hollywood Boulevard, un agente se percató de su sorprendente belleza y le dio su tarjeta para que fuera a probarse en cámaras.
A los ocho meses consiguió su primer papel en “Children of the corn” y su carrera despegó cual cohete. Desde entonces ha tomado reiteradas clases de interpretación.
Ha señalado que actuar se transformó en su mejor terapia y que le “gustan los retos”. Se ha convertido en una de las actrices mejor pagadas, con Gwyneth Paltrow y Angelina Jolie, que ganan alrededor de US$ 10 millones, también por ser rostro de grandes marcas como Estee Lauder y Raymon Weil. Esta última demandó a la actriz por usar en actos públicos relojes y joyas de la competencia, como Dior y Montblanc.
Pero la fama no ha alejado a Charlize de sus raíces. Muy consciente de lo que pasa en su tierra natal, ha participado activamente en campañas contra el racismo y violaciones en Sudáfrica.
 |
 |
