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Un sorpresivo remezón vive por estas horas Ferrari luego de aunciar que su director general, Louis Camilleri, presentó su renuncia por razones personales. El presidente del directorio, John Elkann, ocupará el cargo hasta que se nombre a un sucesor, confirmó la compañía italiana.
Camilleri, quien asumió en 2018 tras la muerte del veterano CEO Sergio Marchionne, también renunciará a la presidencia de Phillip Morris International, uno de los principales patrocinadores de Ferrari.
Una fuente anónima citada por agencias internacionales dijo que Camilleri había enfermado de COVID-19 y estaba convaleciente en su domicilio luego pasar un tiempo en el hospital. Pero también enfatizó que la renuncia no obedecía a motivos de salud.
Al asumir como CEO, Camilleri presentó un plan que incluía revivir modelos clásicos equipados con tecnología de la Fórmula Uno y ampliar la oferta de híbridos a electricidad y gasolina.
Sin embargo, como a varios fabricantes a nivel mundial, la pandemia del coronavirus generó un escenario complejo en Ferrari, que tiene su sede en la región de Emilia Romagna, una de las más afectadas por la pandemia en Italia. Las restricciones sobre la producción afectaron sus ganancias en el tercer trimestre.
Elkann agradeció la contribución que Camilleri durante los dos años que estuvo al mando. "Me gustaría expresar nuestro más sincero agradecimiento a Louis por su incansable dedicación como nuestro director ejecutivo desde 2018 y como miembro de nuestra junta directiva desde 2015", dijo declaraciones recogidas por Motorsport.
“Su pasión por Ferrari ha sido ilimitada y, bajo su liderazgo, la compañía ha afirmado aún más su posición como una de las empresas más grandes del mundo, capitalizando su herencia verdaderamente única y su búsqueda infalible de la excelencia. Le deseamos a él y a su familia una larga y feliz jubilación", añadió.