La industria automotriz enfrenta quizá el cambio más radical de su historia con un éxodo masivo de los fabricantes hacia la electromovilidad en desmedro de los motores a combustión. Esta acelerada transición no está ajena de problemas y uno de los más complejos es la escasez de níquel (Ni), elemento calificado como fundamental para la construcción de las baterías que usan los vehículos cero emisiones.
Así al menos lo reiteró el cofundador y CEO de Tesla, Elon Musk, quien dijo que este es el principal desafío que tiene su compañía, líder en el segmento de los autos eléctricos, para cumplir su objetivo de aumentar su producción durante los próximos años.
A través de su cuenta de Twitter, el empresario aseguró que cada vez se hace más complejo acceder a este elemento y de ahí que en estos momentos sea su “mayor preocupación”, ya que es fundamental para la fabricación de las baterías de iones de litio.
También explicó que, para compensar esta situación, Tesla ha empezado a recurrir al fosfato de hierro para los cátodos de las baterías que monta en los vehículos de menor autonomía. De hecho, los Tesla Model 3 Standard Range Plus producidos en la Gigafactory de Shanghai desde octubre de 2020 incorporan cátodos fabricados con este material.
"Es nuestra mayor preocupación para escalar la producción de celdas de iones de litio", escribió el empresario en su cuenta de Twitter tras ser consultado al respecto.
El níquel es clave para la composición de los cátodos de las baterías de sus coches y además ofrece una gran capacidad de almacenamiento de energía, lo que en la práctica implica menores costes para las empresas del sector.
En ese contexto, Musk reconoció que "nuestra producción es limitada" y, por lo mismo, lleva ya un tiempo haciendo llamados para que se aumente el minado de níquel, especialmente en EE.UU. donde su capacidad de producción está muy por debajo a otros países como Australia, Canadá o Indonesia.
Añadió que debido a esta escasez es que ellos (Tesla) fabrican sus propias celdas de energía y así poder complementar la producción máxima de los proveedores.
"El níquel es el mayor desafío para las baterías de alto volumen y largo alcance", decía en su momento el empresario.
Según publicó Bloomberg, la producción de níquel enfrentará serios problemas para cubrir toda la demanda sobre 2023, fecha en la que las economías habrán recuperado niveles similares a los que se daban antes de la pandemia de coronavirus.