El fabricante alemán BMW reiteró su intención de comenzar a finales 2022 la producción de una pequeña partida del i Hydrogen NEXT, un cero emisiones basado en el X5 y que es parte de los esfuerzos de la compañía para avanzar en el desarrollo de nuevos combustibles más amigables con el medioambiente.
Básicamente el vehículo cuenta con dos tanques de plástico reforzados con fibra de carbono que pueden almacenar un total de 6 kg (13,2 libras) de hidrógeno. Si bien esa cantidad no parece ser mucho, BMW ha planteado que es suficiente para igualar el rango que ostentan las variantes de gasolina.
En líneas generales, el hidrógeno es utilizado para generar la energía
que alimenta a un motor eléctrico montado en la parte trasera del coche y que ofrece hasta 369 HP de potencia (275 kW / 374 PS).
El modelo de BMW también cuenta con un paquete de baterías de alto voltaje que se puede utilizar para ofrecer una "dosis extra de dinámica al adelantar o acelerar".
A juicio de BMW es fundamental avanzar en el desarrollo de esta tecnología que hoy puede parecer más costosa y de más difícil de implementar pero que tienen una serie de ventajas en comparación con los vehículos eléctricos convencionales, incluidos tiempos de repostaje más rápidos o similares a los vehículos de combustión interna.
A juicio del fabricante alemán aún no están dadas "las condiciones necesarias para poder ofrecer a los clientes de BMW Group un vehículo de hidrógeno (de producción masiva)”, pero aseguró se trabaja para ello.
En particular, la compañía citó la falta de infraestructura de reabastecimiento de hidrógeno y señaló que "el hidrógeno verde debe estar disponible en cantidades suficientes y producirse a precios competitivos".
Pese a esta limitante, BMW recordó que Alemania y la Unión Europea han "reconocido la importancia del hidrógeno verde para el sistema energético del futuro", por lo que solo resta esperar que madure aún más el uso de esta tecnología.
La compañía continuó señalando que los mercados clave en Asia, como China, Japón y Corea del Sur, también han "expresado un gran interés en establecer infraestructura para vehículos de hidrógeno".
Si bien esos son desarrollos positivos, la compañía estima que "las condiciones para los vehículos de celda de combustible de hidrógeno se desarrollarán de manera diferente en todo el mundo".
Pese a ello, BMW espera que a mitad de década podrá estar en condiciones de presentar a sus clientes un modelo impulsado por tecnología de pila de combustible de hidrógeno.
