En el 2019 Bugatti sorprendió al mundo automotriz al presentar el imponente modelo Chiron Super Sport 300+, vehículo que rompió por ese entonces un increíble
record mundial de velocidad al lograr los 490,484 kilómetros por hora.
Poco después, con motivo del 110 aniversario de la marca de lujo francesa,
se anunciaron 30 unidades de este superdeportivo que se construirían en el Atelier de Bugatti en Molsheim para exclusivos clientes a un valor de 3,5 millones de euros.
A dos años de ese hito, Bugatti
ya comenzó a realizar las primeras entregas de este modelo y, según informó la prensa internacional, fueron ocho los clientes que recibieron los autos de la partida inicial.
Estos vehículos fueron desarrollados
bajo la misma línea de diseño: todos en acabado negro y naranjo.

Con una potencia de
1.600 CV producida por una versión modificada del icónico motor W16 de 8.0 litros de Bugatti, el Chiron Super Sport 300+ supera la potencia del Chiron en 100 CV.
Los refinamientos del software para el motor, la caja de cambios, el tren motriz y los turbocompresores son adiciones necesarias al
Chiron Super Sport 300+ que contribuyen al rendimiento general y la competencia de alta velocidad del automóvil.
Visualmente y técnicamente distinto del Chiron, la capacidad de velocidad del Chiron Super Sport 300 + se define por su cuerpo
aerodinámicamente optimizado, que le permite “atravesar” el aire con una estabilidad completa más allá de 420 km / h.

En particular, la parte trasera Longtail del hiperdeportivo, que extiende
la carrocería en 25 centímetros, permite que el flujo pase sobre la carrocería durante un período de tiempo más largo, lo que reduce significativamente la pérdida aerodinámica en más del 40 por ciento.
“El Chiron Super Sport 300+ seguirá siendo para siempre una piedra angular de la ilustre historia de nuestra marca, ya que elevó el desempeño automotriz a niveles que alguna vez se pensó que eran inalcanzables”, comentó Christophe Piochon, Director Gerente de Producción y Logística.