El fabricante francés de autos deportivos de lujo Bugatti se sumó a otros constructores de alta gama y puso en marcha un área de venta de unidades de segunda mano que son certificadas por la marca en cuanto a calidad y desempeño.
Ya era extraño que la empresa de Molsheim (Francia) no adoptara esta línea de negocios, siendo una de las marcas con los modelos más costosos del mercado.
En una primera instancia, anunció la compañía, este servicio de certificación ofrecerá distintas versiones del Bugatti Chiron y el Bugatti Veyron que ya han pasado por otras manos.
Los vehículos son revisados por los mecánicos del área y garantizados antes de ser comercializados a precios mucho más ventajosos que los deportivos cero kilómetros, pero igual de prohibitivos para el común de los mortales.
"Aquellos que decidan adquirir un Veyron o Chiron usado a través de un socio autorizado de Bugatti podrán hacerlo con la seguridad de que el vehículo que están comprando exhibe la incomparable calidad que se espera de nuestros modelos", indica el comunicado de la empresa.
En el mismo servicio, añade la declaración, los superdeportivos también se entregan con una garantía limitada de un año.
En el caso del Chiron, es tan completa como la de los vehículos nuevos, y cubre todas las piezas y la mano de obra en caso de problemas mecánicos, eléctricos, de corrosión o de pintura.
Por otro lado, la garantía limitada del Veyron abarca todos los elementos mecánicos y eléctricos, así como el coste de las piezas y la mano de obra, siempre y cuando la falla se informe dentro de los 12 meses.
Estas garantías, precisa el documento, se puede hacer efectiva en cualquier parte del mundo que cuente con servicios autorizados.