Brad Pitt, una de las estrellas más reconocidas de Hollywood, se encuentra inmerso en un nuevo proyecto cinematográfico que promete emocionar a los amantes de los automóviles, la velocidad y la acción, con una cinta que ya se ubica entre las 10 más caras en la historia del cine con un presupuesto que supera los 300 millones de dólares, suficientes para comprar 126 Ferrari Daytona Spider o varias unidades del auto más caro que hoy existe en el mercado.
Así las cosas, la nueva película sobre la Fórmula Uno, producida por Apple y dirigida por Joseph Kosinski, apuesta por ser todo un éxito, por lo cual se ha pensado en todos los detalles tanto en la puesta en escena como en la seguridad, incluidas estrictas clases a los actores para que pudieran controlar los monoplazas de competición y hacer un papel creíble.
En esta cinta, reporta AutoBild.es, Pitt interpreta a un piloto retirado que regresa a la categoría reina del automovilismo para ejercer como mentor de un joven talento. Debido a eso, uno de los principales desafíos ha sido el entrenamiento de los actores para que desempeñen sus roles de manera creíble.
Para encarnar su papel Pitt debió recibir una formación intensiva, incluyendo sesiones de manejo en monoplazas reales, aunque no de Fórmula Uno, sino de la Fórmula 2 modificada.
Este proceso no solo implicó consideraciones de seguridad, sino también un considerable gasto en seguros y otros aspectos logísticos.
Además de los costos asociados con el entrenamiento de los actores, la producción se vio afectada por diversos factores externos, como la huelga SAG-AFTRA que paralizó Hollywood durante 118 días. Estos retrasos, en la industria del cine, se traducen en gastos adicionales significativos.
El rodaje de la película también ha sido calificado como una experiencia única, con escenas filmadas en escenarios y eventos reales de la F1, como Silverstone y Las Vegas. La presencia de los auténticos monoplazas en pista añadió un nivel de realismo y emoción a la producción.
El año pasado Brad Pitt y todo su equipo grabaron escenas en los diferentes grandes premios del deporte motor con el fin de darle mayor realismo a la cinta, algo que ha sido valorado por las escuderías y fanáticos de la disciplina.
Para que esta ambiciosa película sea considerada un éxito, no solo tendrá que cautivar a la audiencia con su trama emocionante y sus impresionantes escenas de acción, sino que también deberá superar la marca de los 600 millones de dólares en taquilla, cifra estimada como óptima para alcanzar un margen de beneficio deseable, según los estándares de la industria del cine.