Con los vehículos eléctricos masificándose por los distintos mercados internacionales, las alertas por incendios de este tipo de autos se han vuelto cada vez más recurrentes en algunos países desarrollados.
En Estados Unidos, por ejemplo, hace un tiempo el Departamento de Bomberos de Sacramento publicó en Twitter un paquete de imágenes con el que llaman la atención de lo peligroso que resultan los autos eléctricos que se ven afectados por incendios espontáneos de sus baterías, haciendo un llamado al mismo Elon Musk para que tome conciencia de la situación
En Corea del Sur, el gobierno realizó una reunión el año pasado para analizar los riesgos que se corren con estos siniestros en los vehículos cero emisiones y discutir medidas.
La cita se concretó tras un incendio en un estacionamiento subterráneo que dañó unos 140 automóviles y obligó a evacuar a decenas de residentes.
Tomando en cuenta estos antecedentes es que el grupo automovilístico Stellantis decidió tomar cartas en el asunto y, según información publicada por el medio especializado Motor.es, ya se encuentra desarrollando una tecnología para prevenir los incendios.
Se trata de un sistema que utiliza los terminales de escape para aliviar la presión de una batería defectuosa.
Cuando las baterías se sobrecalientan, pueden liberar gases inflamables que luego se encienden en presencia de las altas temperaturas. Hidrógeno, así como hidrocarburos como metano, etano, etileno, acetileno, propano, ciclopropano y butano, pueden desprenderse de una batería en mal estado, indican medios internacionales.
De ahí que el proyecto de Stellantis incluye una salida de esta presión y gases para evitar eventuales incendios.
Lo llamativo de esta iniciativa es que, de concretarse, los vehículos eléctricos podrían equipar un tubo de escape similar a los que tienen los autos a combustión interna.
No obstante, aún no hay confirmación de que Stellantis lleve el proyecto a producción.