Dominic Thiem no ha tenido un buen 2021. El juego y el físico no lo han acompañado. De hecho, hoy está al margen de la gira sobre arcilla que se realiza en Europa.
Y en el marco de lo que está viviendo, sobre todo desde que estalló la pandemia, el pupilo de Nicolás Massú hizo una serie de potente y sorpresivas revelaciones.
El austríaco partió hablando de su problema físico, cuyos detalles se desconocían hasta ahora.
"Son varios problemas. El año pasado, durante la primera cuarentena, tuve problemas en mi rodilla derecha. Ahora, es la izquierda. Por aquel entonces, no tuve que bajarme de ningún torneo, porque no había", comenzó contando en entrevista con el medio Der Standard.
"Es un problema congénito, que aparece de vez en cuando en mis rodillas. La gente se está enterando de esto ahora, pero tarda un par de semanas en desaparecer. Ya empezó a dolerme en Australia. Es un dolor intenso, pero se irá", agregó.
Pero el número cuatro del mundo no sólo reveló lo mal que lo tiene el tema físico, también cómo lo ha afectado lo mental desde que ganó el US Open el año pasado.
"Cuando te pasas toda tu vida persiguiendo un objetivo y lo condicionas todo por ello, una vez lo consigues, las cosas dejan de estar igual. Esto es algo normal. El problema es que en el tenis va todo muy rápido y no frena semana a semana", expresó.
"En el tenis, no tienes tiempo de procesar la victoria. En este deporte, si no estás al 100%, pierdes. Esto es lo que me ha pasado a mí en este 2021. El nivel es muy duro y los oponentes son muy fuertes. Por eso, lo mejor es no ir a los torneos y volver cuando estés mejor. Si hubiera ido a Belgrado, habría perdido en primera ronda, de nuevo, y me habría metido más de lleno en esa espiral negativa. Necesito evadirme de eso. Prefiero estar en casa. No soy el primero al que le pasa esto, ni seré el último", detalló.
Y continuó: "Cuando gané el US Open, estaba en un estado de euforia. Los resultados siguieron siendo buenos, llegando a la final de Londres. Pero, preparándome para esta temporada,
caí en un agujero. Veremos si puedo salir. No lo sé. Eso espero".
Thiem siguió con las revelaciones y confesó cómo lo ha afectado la pandemia y sus estragos.
"Siento un vacío. Ni siquiera vi los partidos de Champions League. Esto es una tragedia. Es que no he visto ni los partidos de Montecarlo. He pasado 15 años de mi vida persiguiendo un objetivo, sin mirar a ningún lado. Una vez lo he conseguido, algunas cosas se han derrumbado. Mi vida privada, el tener que lidiar con muchas cosas, hay horizontes que se han ampliado… necesitas hacer algo con tu cabeza, con tu cerebro. Solo era tenis. Quiero cambiar eso", manifestó.
Igualmente cerró con un discurso algo más optimista: "En cualquier caso, no dejaré que esto se lleve por delante mi sueño de jugar al tenis, porque la normalidad tendrá que regresar en algún momento".
