Boca empató a dos con el Benfica en su debut en el Mundial de Clubes que se disputa en Estados Unidos y Carlos Palacios fue protagonista.
El chileno fue titular. Si bien no intervino tanto con la pelota, cumplió tácticamente y participó en la jugada del primer tanto xeneize.
Pero después hizo penal. Cuando finalizaba el primer tiempo, el árbitro mexicano César Ramos fue al VAR y cobró falta del chileno sobre Nicolás Otamendi. Ángel Di María cambió el penal por gol, fue el 2-1 parcial.
Tras el final del encuentro, en el conjunto argentino expresaron toda su molestia por la decisión del juez.
"El árbitro no sé que vio, lo conozco hace muchísimo tiempo, tampoco me sorprende pero hay que seguir y dar vuelta la página. Me pareció que no, después uno lo tiene que ver con más tranquilidad. Pero que en una clase de partido así, que te cobren ese penal es vergonzoso. Hay que seguir, esto es fútbol y es así", afirmó el arquero Agustín Marchesín.
El técnico de Boca, Miguel Ángel Russo, opinó en la misma línea: "Yo creo que el penal no es penal, Desde dónde lo vi no fue. Estamos en un nivel donde son árbitros mexicanos, me han dirigido en Arabia y los conozco. Pero bueno, es muy difícil porque el rival también es fuerte y hay un montón de cosas que conjugan y están dentro. Igual no me quejo del árbitro, porque tenemos que saber resolver ese tipo de problemas porque un gol sobre la hora no te pueden hacer".
"Ellos se encontraron con el penal en el final del primer tiempo que desvirtuó el partido. Desde adentro no me pareció penal, en lo personal", apuntó el goleador Miguel Merentiel.
La polémica con Nicolás Otamendi
El Benfica consiguió el empate a los 84'. Nicolás Otamendi se liberó de la marca en un tiro de esquina y convirtió de cabeza.
El argentino campeón del mundo le fue a gritar el gol a la barra rival, que llegó en masa al Hard Rock Stadium. ¿Por qué?
Los hinchas lo pifiaron todo el partido, ya que Otamendi, pese a nunca jugar en River Plate, es hincha fanático del "Millonario", el clásico rival de Boca.
A los jugadores del xeneize no les gustó nada. Al final del duelo hubo un tenso cruce entre Marchesín y Otamendi.
El jugador trasandino del Benfica se refirió a lo que pasó y dijo: "Es el folklore del fútbol argentino. Me silbaron todo el partido, me tocó hacer el gol y lo grité mucho como todos los que convierto".
Horas después, Otamendi subió a su cuenta de Instagram la foto gritándole el gol a la fanaticada de Boca y acompañó la imagen con la canción "Para la gilada".
